Dice que sabe más sobre el Estado Islámico que sus generales, y afirma entender a los políticos “mejor que nadie”. Ahora hay otro tema en el que el conocimiento experto de Donald Trump supera al de todos los demás: las turbinas eólicas, aunque las llama molinos de viento.
“Lo he estudiado mejor que nadie que conozco”, afirmó el presidente en un extraño segmento de un discurso de fin de semana a jóvenes conservadores en West Palm Beach, Florida, cerca de su retiro de invierno en Mar-a-Lago, donde pasará el Días festivos.
“Nunca entendí el viento. Sabes, conozco mucho los molinos de viento. Son ruidosos, matan a los pájaros. ¿Quieres ver un cementerio de pájaros? Ve debajo de un molino de viento algún día. Verás más pájaros de los que jamás hayas visto en tu vida “.
Trump se metió en una gama de objetivos familiares en un discurso que duró más de una hora en la cumbre de acción estudiantil Turning Point USA, desde la demócrata y presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, hasta su reciente juicio político y los llamados Never Trumpers en el partido republicano que dijo que eran “los seres humanos más tontos de la tierra”.
Pero fueron sus comentarios laberínticos y, a menudo, sin sentido sobre las turbinas eólicas, durante una diatriba contra el New Deal Verde y los recursos de energía renovable, lo que causó sorpresa.
“Se fabrican principalmente en China y Alemania”, dijo Trump sobre las turbinas eólicas, de las cuales hay más de 57,000 en los Estados Unidos, según la Asociación Estadounidense de Energía Eólica. “Pero se fabrican tremendas si te gustan los vapores tremendos. Los gases están arrojando a la atmósfera. Sabes que tenemos un mundo, ¿verdad? Entonces el mundo es pequeño en comparación con el universo. Tan tremenda, tremenda cantidad de humos y todo.
“Hablas de la huella de carbono, los humos están arrojando al aire, ¿verdad? Escupiendo Ya sea en China, Alemania, está en el aire. Es nuestro aire, su aire, todo, ¿verdad? ”
No estaba claro a qué se refería exactamente Trump, o cómo Trump equiparaba las turbinas eólicas que convertían el aire limpio en energía en gases tóxicos que ensuciaban la atmósfera. Pero sí compartió sus pensamientos sobre su apariencia.
“Ves todos esos [molinos de viento]. Todos son diferentes tonos de color “, dijo. “Son como una especie de blanco, pero uno es como un blanco anaranjado. Es mi color favorito, el naranja “.
La “guerra contra el viento” del presidente no es nueva: a principios de este año fue ridiculizado por sus afirmaciones de que las turbinas eólicas destruyeron los valores de las propiedades y causaron cáncer por su ruido.
Se le acusa de haber comenzado sus diatribas contra turbinas eólicas después de que se propusieran desarrollos de parques eólicos cerca del campo de golf que posee en Escocia.
Con información de The Guardian
