TIJUANA, B.C- Una alimentación balanceada es ideal para tener una vida sana, sin embargo la dinámica y la propia cultura del trabajador mexicano no le permite hacerlo.
Los bajos salarios le impiden a la comunidad pagar los altos costos de llevar una dieta balanceada ya que se requieren en promedio 800 pesos a la semana para solventar los gastos de una pareja que decide llevar una vida saludable.
Es más barato ser obeso, ya que cuesta menos desayunar un tamal, un pan o un burrito, que una ensalada.
Un tamal cuesta 20 pesos, un bolillo no más de 5 pesos, un burrito entre 17 y 20 pesos que por comodidad de traslado y por los bajos salarios, es lo que un trabajador promedio pudiera consumir.
Y es que la pobreza es una causal directa de la obesidad, ya que no solo se remarca el tema de que la gente no sabe que es lo que tiene que comer, sino que los salarios no alcanzan para algo más.
María Concepción Esparza, Jefa del departamento de Psicología del Hospital General de Tijuana dijo ¨actualmente las condiciones del país no son nada favorables, yo creo que en ningún estado de la República, quizá en Frontera tengamos un poco más de beneficio por la influencia o por la forma en que tenemos a California aquí a un lado en donde mucha gente puede cruzar al otro lado a adquirir víveres, quizá a menos precio y acostumbrados a esta forma de vivir¨
Con información de Ivonne Hernández
