El obispo de Guerrero busca una tregua navideña entre los narcos

Un obispo en Guerrero apunta a negociar una tregua navideña entre los cárteles enfrentados en la región de la Sierra del estado.

Salvador Rangel, obispo de la diócesis de Chilapa-Chilpancingo, dijo que está tratando de mantener conversaciones con los líderes del cartel para ese fin.

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“Si las guerras terminan en Navidad incluso a nivel mundial, ¿por qué no en Guerrero? Hagamos de ese período, el más hermoso del año, uno en el que podamos vivir en paz “, dijo en una entrevista después de asistir al primer día de un foro de paz celebrado esta semana.

Los cárteles en guerra previamente acordaron una tregua durante el proceso electoral previo a las elecciones del 1 de julio, dijo Rangel.

Guerrero, uno de los mayores estados productores de opio-amapola de México, está plagado de crímenes violentos causados ​​en gran parte por disputas territoriales entre pandillas criminales.

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El obispo dijo que, como resultado de su diálogo casi constante con sus líderes, convenció al Cartel de la Sierra para que permitiera que el tráfico pasara libremente por la carretera entre Filo de Caballos, en el municipio de Leonardo Bravo, y la capital del estado, Chilpancingo.

Las escuelas y los servicios médicos en la parte baja de la región de la Sierra también están funcionando normalmente, dijo.

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Sin embargo, Rangel dijo que aún no había logrado reunirse con los líderes de los grupos delictivos que operan en Tlacotepec, una ciudad ubicada al otro lado de la región de la Sierra en el municipio de Heliodoro Castillo.

Dijo que hay dos “grupos violentos” que han hecho imposible viajar a Chilpancingo, y agregó que tenía la esperanza de poder reunirse con los líderes de los dos grupos al mismo tiempo.

“Es difícil reunir a todos porque cada grupo tiene sus propios intereses. . . eso sería ideal, pero por ahora las reuniones serán separadas ”, dijo Rangel.

Hablando anteriormente en el foro de paz, el obispo les dijo a los asistentes que él ha viajado con frecuencia a las comunidades de la Sierra para mantener conversaciones con líderes narco con el objetivo de lograr la paz y la reconciliación.

Rangel afirmó que los políticos y las instituciones gubernamentales no han logrado lograr la paz porque son corruptos.

Durante mucho tiempo ha instado a las autoridades a seguir su ejemplo y dialogar con las bandas criminales como un medio para alcanzar la paz.

El año pasado, el obispo generó controversia cuando dijo que las pandillas de delincuentes forman parte del tejido social de las comunidades remotas de Guerrero que cultivan drogas y su presencia es aceptada y bienvenida por los habitantes.