CIUDAD DE MÉXICO, México.- Han pasado 49 años desde la matanza de Tlatelolco, el 2 de octubre de 1968 cuando miles de estudiantes y civiles murieron a manos de militares y policías que actuaron bajo las órdenes del Gobierno Federal, es decir, el presidente Gustavo Díaz Ordaz, y el secretario de educación, Luis Echeverría.
Durante todos estos años, “el 2 de octubre no se olvida”, pues el recuerdo de todos aquellos que perdieron la vida ese día sigue presente de una u otra manera en la historia de México.
En un largo proceso, los manifestantes, miembros de la UNAM y el IPN, además de otras organizaciones, pedían a las autoridades acciones de democratización y a favor de los derechos civiles. El 2 de octubre del 68, miles de estudiantes se reunieron para realizar un mítin en la Plaza de las Tres Culturas, ubicada en la unidad habitacional de Tlatelolco.
El objetivo de dicha reunión era dar a conocer un pliego petitorio de 6 puntos al gobierno de Díaz Ordaz, entre los cuales se encontraba libertad a los presos políticos; estudiantes y activistas detenidos por manifestarse, y la derogación del artículo 145 del Código Penal Federal, que acusaba “la difusión de ideas que perturben el orden público o afecten la soberanía nacional”.
Alrededor de las 18:00 horas, un helicóptero lanzó una bengala sobre la plaza, fue ahí cuando comenzaron a surgir disparos desde lo alto de los edificios, y los miembros del Ejército que estaban en piso dispararon contra la multitud. El conocido “Batallón Olimpia” que mató y detuvo a miles de jóvenes y civiles.
Al día siguiente, la plaza fue limpiada y los medios nacionales trataron la noticia como un simple enfrentamiento, donde sólo murieron algunos “revoltosos”. La matanza se realizó solamente 10 días antes de que se inauguraran los Juegos Olímpicos de México, por los cuales el país sería el centro de atención en todo el mundo.
Con información de Nación 321
