Frente a un importante informe de la ONU que advierte sobre inundaciones, sequías, calor extremo y aumento de la pobreza, si el mundo no toma medidas radicales para enfrentar el cambio climático, Donald Trump se ha mostrado reacio a hablar de forma extraña.
El presidente de los EE. UU. Visitaba Florida, un estado particularmente vulnerable al aumento del nivel del mar y actualmente en la ruta del huracán Michael, cuando el informe del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático de la ONU advirtió el lunes que se necesitaban cambios “sin precedentes” para evitar los graves impactos si el El mundo calienta 1.5C más allá del período preindustrial.
Trump, quien anteriormente había calificado el cambio climático como un “engaño” y se preguntó si el calentamiento global estaba ocurriendo porque nevó el invierno pasado, no dijo nada públicamente sobre el informe. La Casa Blanca no respondió a una solicitud de comentarios.
De nuevo, esto pone a Trump en desacuerdo con el resto del mundo en lo que respecta al cambio climático, y EE. UU. Es el único país del mundo que desaprueba el acuerdo climático de París, que comprometió a los gobiernos a intentar mantenerse dentro del límite de 1.5C. El planeta ya se ha calentado alrededor de 1C en los últimos 150 años.
“No creo que a la administración le importe esto en absoluto”, dijo Andrew Dessler, un científico del clima en la Universidad Texas A&M. “Sólo quieren descubrir cómo ignorarlo todo”. Es realmente decepcionante. “Es un verdadero fracaso que el gobierno de los Estados Unidos no ayude a las personas a comprender que hay un tren que nos viene por la vía rápida y que tenemos que salir del camino”.
La Agencia de Protección Ambiental de EE. UU., Que tiene una posición oficial de que el cambio climático es perjudicial para la salud pública, agradeció el “arduo trabajo de los científicos y expertos”, pero dijo que no “respaldó formalmente los hallazgos específicos presentados por los autores”.
Con información de The Guardian
