La ONU condena a México por el caso de un periodista torturado

El Consejo de Derechos Humanos de la ONU reprendió a México por no proteger a sus periodistas en un fallo sobre el caso de un periodista prominente que fue secuestrado y amenazado de violación por la policía que actúa a instancias de un político poderoso y uno de sus patrocinadores empresariales.

El fallo fue el primero del consejo contra México, que se ha convertido en uno de los países más asesinos del mundo para los trabajadores de los medios.

- Publicidad-

La resolución encontró que la periodista Lydia Cacho fue detenida arbitrariamente, sometida a tortura y violencia de género y que se violó su derecho a la libertad de expresión.

La resolución también ordena que se realicen reparaciones y pidió la abolición de las leyes en ocho estados que penalizan la calumnia y la difamación, que se han utilizado para perseguir a periodistas y denunciantes, se descartan.

“Este es un mensaje muy claro para el estado mexicano … la violencia contra la prensa, contra las mujeres, contra las periodistas es inaceptable”, dijo Leopoldo Maldonado, subdirector del grupo de libertad de prensa Artículo 19 México.

- Publicidad -

“Tenemos un estado, que actúa como una mafia, que actúa para proteger a los suyos, para perseguir a quienes dicen la verdad, para perseguir a quienes buscan justicia y para defender los derechos humanos a través del periodismo”, dijo.

El libro de Cacho de 2005, The Demons of Eden, expuso una red de pedófilos en Cancún, que según ella era dirigida por el empresario Jean Succar Kuri. (Posteriormente Succar fue condenado). También mencionó que un hombre de negocios del estado de Puebla, Kamel Nacif, el “rey del dril”, era amigo y pagó la defensa de Succar.

- Publicidad -

Cacho fue detenida en Cancún por cargos de difamación por parte de la policía de Puebla en diciembre de 2005. Fue conducida durante 20 horas a Puebla, tiempo durante el cual la policía se burló de ella, la amenazó con violarla y le forzó un arma en la boca. En otros puntos del viaje, la policía pensó en ahogarla en el sonido de Campeche.

El caso se convirtió en un escándalo nacional luego de que se filtró una conversación telefónica grabada en la que Nacif -quien nunca negó conocer a Succar ni desmintió los informes de Cacho- es interceptado por el entonces gobernador de Puebla Mario Marín para perseguir a Cacho por su denuncia.

Con información de The Guardian