El joven nadador italiano Manuel Bortuzzo, de 19 años, considerado una de las grandes promesas en el deporte acuático de su país, ha sido víctima de un episodio que conmociona al mundo. Bortuzzo ha perdido la movilidad de sus piernas tras recibir un disparo en Roma en la noche del pasado sábado, lo que le provocó una lesión medular con la que no podrá volver a caminar.
“Lamentablemente esto quiere decir que por el momento creemos que no puede haber una recuperación funcional del movimiento de las piernas”, explicó Alberto Delitala, el director del Departamento de Neurología del hospital romano San Camillo.
Bortuzzo, oruindo de Trieste, al norte de Italia, había llegado a la capital para entrenarse y poder acceder en un futuro al equipo nacional, siendo ya considerado una “promesa” del medio fondo por la Federación Italiana de Natación. “Manuel despertó y está mejorando visiblemente hora tras hora. En los próximos días, abandonará los cuidados intensivos y será trasladado a una sala común”, dijo Paolo Barelli, presidente de la entidad. Su vida ya no corre peligro pero difícilmente pueda volver a caminar.
Su calvario comenzó en la noche entre el sábado y el domingo, cuando Manuel se encontraba con unos amigos, su novia y otros atletas a las puertas de un bar al que no pudieron acceder porque se había producido una violenta pelea.
De regreso a su casa, el joven fue disparado desde un ciclomotor y la bala le alcanzó en el tórax. Las autoridades sospechan que los agresores, supuestamente vinculados a la mafia local, pudieron confundir al joven nadador con otra persona.
La Gazzetta Dello Sport informó que dos hombres llamados Lorenzo Marinelli y Daniel Bazzano, de 24 y 25 años, habrían admitido entre lágrimas ser los responsables pero dijeron que fue “por error”. El periódico agrega que ambos fueron trasladados a la prisión de Regina Coeli y afrontarán cargos por intento de homicidio y tenencia ilegal de armas.
Con información de Marca
