GUADALAJARA, Jalisco.- La arqueóloga subacuática mexicana Pilar Luna Erreguerena falleció el pasado domingo a la edad de los 76 años. La gran investigadora formó parte esencial de las investigaciones acuáticas, además fue protectora del patrimonio cultural mexicano.
El homenaje a la arqueóloga con 37 años de labor fue llevado en Veracruz, después de que se reportara su fallecimiento. Eduardo Matos Moctezuma, gran amigo de Pilar, dio unas palabras en el evento para recordarla con cariño y respeto.
“En cuanto terminó la clase del profesor Matos, crucé corriendo el vestíbulo del Museo Nacional de Antropología, que entonces alojaba a la ENAH en su ala derecha y a la biblioteca del instituto en la izquierda, para conocer más acerca de aquella disciplina que parecía combinar las dos grandes pasiones de mi vida: la arqueología y el agua”, mencionó.
Luna Erreguerena participó en un proyecto de búsqueda submarina en 1974, para localizar artefactos de origen Maya en Quintana Roo. Cuatro años después escribió un libro que fue catalogado como el “Padre de la Arqueología Subacuática”. Además, dio cursos especializados en la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH).
La investigadora también defendió el patrimonio cultural de México debido al hambre de las empresas privadas de lucrar con el espacio y sacar recursos de él, sin respetar las culturas establecidas y la historia en los restos.
Su proyecto de investigación sobre la “Flora de la Nueva España” dio frutos al demostrar que la recuperación de los restos sería un aporte significativo a nivel mundial, de ahí su famosa frase: “los tesoros no se venden, solo se estudian”.
Con información de Aristegui Noticias
