Grupos feministas de derechos de las mujeres han denunciado las incursiones de la policía en sus oficinas en varias ciudades polacas, que resultaron en la confiscación de documentos y computadoras, un día después de que las mujeres hicieran marchas contra el gobierno para protestar contra la ley restrictiva del aborto.
Las incursiones tuvieron lugar el miércoles en las ciudades de Varsovia, Gdańsk, Łódź y Zielona Góra. Se dirigieron a dos organizaciones, el Centro de Derechos de la Mujer y Baba, que ayudan a las víctimas de violencia doméstica y participaron en las protestas contra el gobierno de esta semana.
Los activistas por los derechos de las mujeres dijeron el jueves que la pérdida de archivos dificultaría su trabajo y acusó a las autoridades de intentar intimidarlos. Los fiscales negaron la acusación, diciendo que el momento de las incursiones un día después de las marchas fue una coincidencia.
Algunos temen que el partido gobernante de Derecho y Justicia, liderado por Jarosław Kaczyński, siga los pasos de la vecina Hungría, donde grupos no gubernamentales han sido hostigados por el primer ministro, Viktor Orbán.
“Se trata de un abuso de poder porque, incluso si hay sospechas de actos ilícitos, una investigación podría hacerse de una manera que no afecte al trabajo de las organizaciones”, Marta Lempart, directora de la huelga de feministas polacas, que organizó las protestas, dijo a Associated Press.
Los grupos de mujeres dijeron que la policía les dijo que los fiscales estaban buscando evidencia en una investigación sobre sospechas de mal comportamiento en el ministerio de justicia bajo el gobierno anterior. En ese momento, el ministerio financió a los grupos de mujeres.
“Tememos que esto sea sólo un pretexto o señal de advertencia para no participar en actividades que no estén en línea con el partido gobernante”, dijo el Centro de Derechos de la Mujer en un comunicado.
Con información de The Guardian
