Las autoridades están en alerta luego de la detección de nueva actividad en el volcán Popocatépetl.
La agencia nacional de protección civil publicó ayer un informe que reveló el descubrimiento de una cúpula recién formada en el cráter del volcán, que se extiende por aproximadamente 200 metros de diámetro.
El informe predijo que la formación podría provocar la caída de cenizas en los próximos días.
“Los próximos días podrían ver más episodios de crecimiento en el domo No. 82, lo que implicaría una actividad similar a la del jueves pasado, 14 de febrero, o similar a la observada en eventos anteriores”.
El jueves pasado, El Popo, como también se le conoce, estalló en una serie de explosiones que dispararon fragmentos de roca fundida desde su cráter hasta aterrizar a una distancia relativamente corta.
El comité científico del volcán también celebró una reunión especial ayer para revisar los desarrollos en la actividad del volcán.
El comité advirtió sobre la posibilidad de un escenario más serio: una poderosa erupción volcánica que podría enviar trozos de tierra fundida para aterrizar a una distancia mucho mayor, junto con una columna de ceniza de varios kilómetros de altura que se asfixia. Los científicos de la organización citaron ocasiones previas en las que una actividad similar predijo tal erupción.
A pesar de la formación de la cúpula dentro del cráter del volcán, las autoridades no han aumentado la alerta volcánica de la Fase 2 amarilla.
El comité científico, afiliado a los sistemas de Protección Civil, dijo que estaba en estado de alerta y que se mantendrá en contacto constante con las autoridades correspondientes en Morelos, Tlaxcala, Puebla, el estado de México y la Ciudad de México.
