Gilberto Fimbres Hernández, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX), informó que es preocupante la designación de Donald Trump como presidente electo de Estados Unidos, por todo lo que señaló en campaña, pero, agregó, en México hay varias problemáticas que aquejan a la ciudadanía, como la violencia y la corrupción, que se deben resolver antes que mirar hacia afuera.
En entrevista el presidente de Coparmex, refirió que sí les inquieta y preocupa la situación en el país vecino, sobre todo por los “espíritus que (Trump) ha creado de conflicto y lo que mencionó en su campaña, pero también, dijo, cree que parte de ello fue solamente para convencer a un grupo de personas para que votaran por él.
Estos “espíritus de conflicto”, agregó, también se deben a una cuestión de conflicto más de moral que económico, aunque sabe que ello también puede impactar de alguna manera.
Fimbres Hernández destacó que más allá de todo eso, entre México y Estados Unidos existe una relación muy antigua que sería muy difícil de pensar sea coartada, además porque, dijo, “somos unos vecinos extraordinarios” y el territorio fronterizo jamás les ha dado problemas a los estadounidenses.
Esa situación, destacó Fimbres, es algo que Trump debe tomar en cuenta durante su gobierno, que vea la posición que tiene México frente a Estados Unidos y contemple todos los beneficios y riquezas que nuestro país les ha aportado.
El presidente de Coparmex resaltó que él está convencido que en el país vecino hay una democracia, por lo tanto hay un sistema que tampoco le va a permitir hacer lo que él quiera, puesto que en este sistema tripartito participan varias instancias del gobierno en la toma de decisiones, por lo que no deberá presentar problemas.
Sin embargo, detalló, fuera de todo ello en México hay muchas cosas y conflictos todavía que se tienen que resolver, agregó que se está mirando mucho hacia afuera pero aquí adentro tenemos un problema muy serio de inseguridad, corrupción e impunidad, y ninguno de ellos tiene que ver con Donald Trump.
Por lo tanto, dijo, tenemos la responsabilidad de ver primero hacia adentro, pensar qué vamos a hacer, cómo lo vamos a resolver y así tener un frente más eficiente en torno al panorama internacional, para que en consecuencia Trump vea que sus vecinos son un buen apoyo para Estados Unidos y que no representamos un problema para ellos.
