Una disparo aparentemente inofensivo en una carrera de 20 kilómetros en Bruselas ha llevado al primer ministro belga, Charles Michel, a buscar tratamiento médico por pérdida auditiva después de aproximarse demasiado al tiro de una pistola de salvas ejercida por la princesa Astrid, la hermana menor del rey belga, Philippe.
Michel fue fotografiado sorprendido por la explosión al comienzo de la carrera por la capital belga el domingo, pero al principio parecía capaz de reírse del momento, ahorrando algunos rubores reales.
El lunes, sin embargo, el primer ministro había buscado un examen médico de su oído. Para el martes, la apretada agenda del primer ministro, incluyendo la presentación de pruebas a un comité del parlamento belga, tuvo que ser despejada.
“El primer ministro debe seguir una serie de tratamientos dentro de las 48 horas después del incidente”, dijo a la prensa su portavoz, Barend Leyts. Se espera más tratamiento médico durante la semana, agregó el portavoz. La familia real belga todavía tiene que comentar sobre el incidente.
La semana pasada, el gobierno belga fue anfitrión del presidente estadounidense y de su esposa, Melania, antes de una reunión con líderes de la UE y de la OTAN. Se dijo que las discusiones entre Trump y Michel habían ido bastante bien, aunque fuentes señalaron que el presidente no temía interrumpir y que sólo parecía estar vagamente interesado en la economía belga.
En cambio, se dijo que Trump había pasado tiempo con Michel quejándose de las dificultades de establecer clubes de golf en los estados de la UE, mientras comía chocolates belgas. “Estos son los mejores”, dijo Trump a su anfitrión.
Una fuente dijo al diario belga Le Soir: “Cada vez que hablamos de un país, recordaba lo que había hecho. ¿Escocia? Dijo que había abierto un club. ¿Irlanda? Dijo que le tomó dos años y medio para obtener una licencia y eso no le dio una imagen muy buena de la Unión Europea “.
Con información de The Guardian
