El ex presidente de Ecuador, Rafael Correa, quien es buscado en su tierra natal por sospecha de secuestro, solicitó asilo político en Bélgica, dijeron a la AFP dos fuentes bien ubicadas.
Correa ha vivido cerca de Bruselas con su familia desde 2017, y solicitó asilo el 25 de junio de este año. La solicitud ha estado bajo consideración desde agosto por la agencia de refugiados CGRA de Bélgica, dijo una fuente.
Correa, ex economista de izquierda, fue presidente de su nación andina entre 2007 y 2017. El miércoles, un juez ecuatoriano le exigió que regresara a su país para enfrentar cargos relacionados con el secuestro de un oponente en 2012.
Correa insiste en que es inocente, y el jueves, en una entrevista con AFP, acusó a las nuevas autoridades de su tierra natal de “persecución política”, y a su sucesor, Lenín Moreno, de un plan contra él.
La AFP ha sabido de dos fuentes, argumentando que no se le daría un juicio justo si regresaba a Ecuador, Correa se adelantó a la emisión de una orden de arresto en su contra solicitando asilo en Bélgica.
Una de las fuentes dijo a la AFP que Correa había asistido a una audiencia de asilo a fines del verano. El político de 55 años no confirmó ni negó esto.
Un portavoz de CGRA, Damien Dermaux, dijo que la agencia no haría comentarios sobre casos individuales, pero dijo que en Bélgica una solicitud de asilo se decide en promedio en unos tres meses, pero podría demorar más.
Correa ha vivido en Bélgica, donde su esposa tiene la ciudadanía y donde había estudiado antes de su carrera política, desde julio de 2017.
Se le acusa de ordenar el secuestro en 2012 en la capital colombiana, Bogotá, del ex legislador Fernando Balda, quien fue forzado a entrar en un automóvil por una pandilla que tenía la intención de devolverlo a Ecuador. La policía colombiana intervino para salvarlo.
Con información de The Guardian
