Los grupos rebeldes sirios rechazaron el lunes la planeada conferencia de Sochi en Siria y dijeron que Moscú busca evitar un proceso de paz en Ginebra basado en las Naciones Unidas y culpar a Rusia por cometer crímenes de guerra en el país.
En una declaración de alrededor de 40 grupos rebeldes que incluyen algunas de las facciones militares que participaron en rondas anteriores de conversaciones de paz en Ginebra, dijeron que Moscú no había presionado al gobierno sirio para llegar a un acuerdo político.
“Rusia no ha contribuido un solo paso para aliviar el sufrimiento de los sirios y no ha presionado al régimen que afirma que es un garante por avanzar en cualquier camino real hacia una solución”, dijo la declaración de los rebeldes sirios.
Rusia, que se ha convertido en el jugador dominante en Siria después de una importante intervención militar hace más de dos años, recibió el respaldo de Turquía e Irán para celebrar un congreso nacional de diálogo sirio en la ciudad rusa de Sochi el 29 de enero.
“Rusia es un país agresor que ha cometido crímenes de guerra contra los sirios. Se mantuvo con el régimen militarmente y defendió su política y durante siete años impidió la condena de la ONU del régimen [del presidente sirio Bashar] Assad “, dijo el comunicado.
Moscú dice que ataca a los milicianos, pero los rebeldes y residentes dicen que los ataques aéreos rusos se llevaron a cabo desde que una gran campaña aérea hace más de dos años ha causado cientos de bajas civiles en bombardeos indiscriminados de áreas civiles lejos de la línea del frente.
Algunos rebeldes dijeron que aún no habían tomado una decisión.
El enviado de la ONU en Siria, Staffan de Mistura, dijo que el plan de Rusia para convocar el congreso debería evaluarse por su capacidad de contribuir y apoyar las conversaciones de Ginebra dirigidas por la ONU para poner fin a la guerra en Siria.
Con información de The Guardian
