La reforma inmigratoria de EEUU fracasa estrepitosamente

La Cámara de Representantes de los Estados Unidos ha rechazado firmemente un proyecto de ley de reforma migratoria, a pesar de una intervención de última hora de Donald Trump para superar las profundas divisiones internas que han fracturado a los republicanos en este tema durante más de una década.

En una vergonzosa derrota, más de 100 republicanos se unieron a los demócratas para rechazar el proyecto de ley en una votación de 121-301. La medida fue diseñada para cumplir con la visión de la línea dura de Trump del sistema de inmigración de los EE. UU., Que incluye fondos para un muro fronterizo y un aumento en la aplicación de medidas contra los inmigrantes indocumentados.

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Después de la votación, un grupo de republicanos centristas, que desencadenaron el último impulso para la reforma migratoria, expresaron su consternación de que las semanas de negociación con los conservadores derechistas no produjeron un plan viable.

“Lo que presenciamos hoy fue una minoría de republicanos que se unieron a cada demócrata en la Cámara para duplicar un sistema de inmigración fallido, roto, ineficiente, injusto y en ocasiones cruel”, dijo el congresista Carlos Curbelo, un republicano de Florida, después de la votación.

El congresista Jeff Denham, un republicano de California, dijo que el fracaso del miércoles mostró que la reforma migratoria debe ser un esfuerzo bipartidista.

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“Lo que era obvio hoy es que los republicanos no pueden aprobar un proyecto de ley republicano por 218 votos, al igual que los demócratas en 2010”, dijo, y prometió que este no era el final de su campaña de inmigración.

Curbelo señaló que la mayoría de los republicanos apoyó un plan que ofrecería a los jóvenes inmigrantes indocumentados, conocidos como Dreamers, un camino hacia la ciudadanía, lo que sugiere que tal disposición podría ser parte de futuras negociaciones bipartidistas.

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Los legisladores se negaron a proporcionar detalles sobre su próximo movimiento. Es probable que los republicanos recurran a un plan más estrecho que pondría fin a las separaciones de las familias migrantes en la frontera, una práctica de la administración Trump que provocó una feroz condena internacional. Los senadores también están considerando un plan que abordaría este tema, aunque es poco probable que ocurra antes del receso del 4 de julio.

Con información de The Guardian