Reino Unido no puede culpar a la UE por los problemas que llevaron al Brexit, dice Juncker

Los políticos británicos sembraron las semillas de Brexit culpando a la Unión Europea por problemas sobre los que el bloque tiene poco control mientras construye una economía dependiente de mano de obra extranjera, dijo el presidente de la Comisión Europea.

Jean-Claude Juncker advierte que “durante demasiado tiempo” los políticos a nivel nacional han permitido a la UE ser un chivo expiatorio y que las consecuencias pueden ser ahora vistas.

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Además de hacer un llamamiento apasionado a los miembros de la “nueva Europa de los 27” para que reafirmen su compromiso con la Unión y se apropien de su futuro, Juncker abrió fuego a los que sentaron las bases de la decisión de Gran Bretaña el 23 de junio de abandonar la UE.

En observaciones que algunos considerarán contenciosas, señala que en los temas más destacados de la campaña del referéndum, la UE es en gran parte impotente para intervenir, incluyendo la limitación de la inmigración al Reino Unido.

“No debemos pretender que Europa sola pueda resolver todos los problemas”, dijo Juncker. “Bruselas” no debería haber sido constantemente culpado en el discurso político británico por cosas de las que la UE no es responsable: ahora conocemos el resultado de tal retórica.

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“Por ejemplo, la UE tiene pocos poderes en tres de las cuatro áreas de política que suelen ser más polémicas en las elecciones en el Reino Unido: la sanidad, la educación y el bienestar.”

“En la cuarta, la inmigración, la libre circulación es parte integrante del mercado único de la UE, que el Reino Unido siempre ha apoyado firmemente, y es un derecho con límites claros. Por otra parte, la mayoría de la inmigración al Reino Unido viene de fuera de la UE, donde la política es hecha por el Reino Unido solamente.”

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“También es el Reino Unido quien decide sobre las cuestiones económicas estructurales que han llevado a la alta demanda de empleadores británicos para la mano de obra migrante”.”

Según los últimos datos de la Oficina de Estadísticas Nacionales, la migración hacia el Reino Unido se estimó en 596.000 en el año que termina en septiembre de 2016, comprendiendo 268.000 ciudadanos de la UE, 257.000 ciudadanos no comunitarios y 71.000 ciudadanos británicos.

En los últimos dos años, el número de inmigrantes de la UE sólo eclipsó marginalmente los números procedentes de otros lugares, tras un largo período en que los números procedentes de países no pertenecientes a la UE eran mucho más elevados.