La Marina argentina canceló la operación de rescate por su submarino perdido 15 días después de que una explosión informada aparentemente lo enviara al fondo del océano Atlántico frente a la costa de la Patagonia.
“Nadie será rescatado”, dijo el capitán de la armada Enrique Balbi, quien ha estado actuando como vocero oficial del esfuerzo de rescate. No obstante, la operación de búsqueda del ARA San Juan continuaría en aguas de hasta 500 metros de profundidad, agregó.
“A pesar de la magnitud del esfuerzo realizado, no ha sido posible localizar el submarino”, dijo Balbi, refiriéndose a la respuesta multinacional que ha incluido aviones, barcos y personal de Estados Unidos, Gran Bretaña y Rusia.
El submarino tenía 44 personas a bordo. Luis Tagliapietra, cuyo hijo Damián era un aprendiz de 27 años en el submarino, dijo al canal de noticias TN: “Esto es perverso e imposible de entender. Están haciendo juegos de palabras”, refiriéndose a que la armada anunció que suspendía los esfuerzos de rescate y acordó seguir buscando el submarino mientras no esté en aguas muy profundas. “Lo que realmente están diciendo es que ya no lo van a buscar más”.
El San Juan desapareció el 15 de noviembre cuando perdió el contacto por radio con la base naval de la Marina argentina en Mar del Plata, pero no fue hasta dos días después que la armada anunció públicamente que el submarino había desaparecido.
“Han pasado más del doble de días de lo que hubiera sido posible rescatar a la tripulación”, dijo Balbi a los periodistas.
El gran esfuerzo de rescate marítimo y aéreo para el submarino de fabricación alemana ahora se reducirá a tratar de localizar el buque en sí.
Los familiares de la tripulación ya habían abandonado la esperanza de que los encontraran con vida. “Nos mintieron desde el principio”, dijo Tagliapietra.
Familiares de la tripulación están resentidos por la cantidad de desinformación engañosa que recibieron del gobierno en un aparente intento de mantener sus esperanzas en vida en los primeros días después de que el submarino desapareció.
Con información de The Guardian
