Un ladrón en la Ciudad de México descubrió ayer que huir a pie con una estatua de bronce de tamaño natural no era tan fácil como pensaba.
La policía arrestó al hombre cuando intentaba escapar a pie con su botín.
Cerca de las 9:30 am, la policía alertó que un hombre había robado una estatua dedicada al político y general del ejército Ignacio Mejía Fernández de Arteaga, ubicada en la intersección de la avenida Paseo de la Reforma y la calle Ricardo Flores Magón, en el distrito de Cuauhtémoc.
Cuando los agentes llegaron a la escena encontraron al hombre que intentaba llevarse la estatua, parcialmente oculta por una manta, en una carretilla de mano.
Se cree que el hombre de 45 años tenía la intención de vender su botín por su contenido de bronce.
El Paseo de la Reforma podría ser un objetivo tentador para cualquier persona interesada en una incursión en el mercado negro de metales.
Un censo oficial dice que hay 42 esculturas instaladas a lo largo de la vía, junto con 24 jarrones y 14 bancos de cantera de piedra.
Pero las tapas de las alcantarillas son un blanco más fácil que las esculturas. El gobierno de la ciudad paga un promedio de 11,000 pesos por cobertura; Los ladrones los venden en el mercado negro por unos 360 pesos.
Otros ladrones se fijan más y roban las líneas eléctricas de cobre, que luego pueden venderse por 90 pesos por kilogramo en el mercado negro.
Con información de Mexico News
