CLEVELAND, Estados Unidos.- El receptor puertorriqueño de los Indios de Cleveland Roberto Pérez tomó un vuelo para viajar a su tierra natal y pasar la Navidad con su madre.
Es la segunda ocasión que Pérez viaja a Puerto Rico desde que terminó la temporada. El vive en Cleveland, pero en esta ocasión decidió pasarla en familia y ayudar a su madre.
La primera vez que viajó se encontró con un Puerto Rico en crisis, con carreteras dañadas, árboles caídos, con lonas donde había casa. Todo eso lo vio desde el avión antes de aterrizar en el Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín.
Pérez pensó en su madre y en que su casa estaba entre las tantas estructuras destruidas por los fuertes vientos del Huracán María, que azotó a la isla en septiembre.
Dice Pérez. “Fue difícil y lo viví por varios días. Fue horrible”.
Hoy el receptor se encuentra de regreso en casa en la isla del escando con un regalo especial que tiene en mente: quiere hablar con su mamá, Liliam Martínez, sobre la búsqueda de una nueva casa.
En Mayagüez, en el oeste de la isla, la casa en la que Pérez se crio sufrió daños serios, todos fueron materiales.
“Ese fue el lugar en el que pasé toda mi vida. Fue la casa en la que me crié. Verla así fue triste, pero me hizo recordar todo lo que mi mamá ha hecho por mí y cómo quiero ayudarla ahora. Es triste, pero ella merece una nueva casa”.
Cuando habla acerca de su mama, Pérez suele decir lo mismo: “Ella fue mi papá y mi mamá”.
Pérez, quien en abril firmó una extensión de cuatro años con Cleveland, quiere ayudar a su mamá.
Hoy se encuentra en Puerto Rico para regalarle una casa a su mamá, una mujer divorciada que le enseño los valores a su hijo y a jugar beisbol. Pérez firmó recientemente un contrato de cuatro años con los Indios.
Con información MLB
