El 30 por ciento de las pólizas del programa Seguro de vida para jefas de familia, otorgadas por la Secretaria de Desarrollo Social del gobierno federal, han sido cobradas. Las reclamaron familiares, de mujeres muertas de manera violenta.
El objetivo del programa es proteger hasta los 23 años de edad, a los hijos de madres que viven en condiciones de desventaja económica.
Las estadísticas de las instituciones, coinciden en dar un panorama difícil para el género femenino.
La Presidente de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos en Baja California, Melba Olvera comentó: “en general en el marco global de las quejas que tenemos son arriba de mil 200 quejas las que son por violación de derechos humanos de las mujeres son alrededor de 200 un poquito más al último corte”.
Pero la impunidad prevalece a pesar de las numerosas quejas documentadas. Hay grandes pendientes aún en el tema, en particular en el seguimiento a los casos que se han presentado en el estado de muertes violentas de mujeres, la comisión estatal de derechos humanos desde el año 2015 hizo un exhorto a la Procuraduría General de Justicia del Estado para que todos los casos de muertes violentas de mujeres en el estado se investiguen como feminicidios.
La procuraduría general de justicia del estado, reporta que en lo que va del año, se han cometido 54 homicidios contra mujeres. Sólo dos responsables, han sido procesados por feminicidio. En el 2015 se contabilizaron 74, cuatro se consignaron por feminicidio. El móvil del resto, se relaciona con el narcomenudeo.
Esta situación ha orillado a las autoridades a reforzar programas de apoyo que incluyen asesoría jurídica y psicológica para evitar la violencia contra la mujer, aunque el reto es crear conciencia de la importancia de la denuncia
Gabriela Navarro, directora Inmujer en Tijuana comentó: “en etapa de prevención que aprendan que la violencia se ve en un círculo de humillaciones, abusos, golpes, que pueden llegar al feminicidio”.
Son alrededor de cinco mujeres por día, las que acuden al instituto municipal de la mujer para solicitar ayuda, sin embargo ,no todas se atreven a denunciar ante el ministerio publico los casos de violencia y abandonan la terapia…sin medir las consecuencias.
