El Senado de EEUU ha aprobado la primera ola de ayuda por desastre – un paquete de socorro de 15.300 millones de dólares – a la región devastada por el huracán Harvey como parte del acuerdo sorpresa alcanzado entre Donald Trump y el liderazgo demócrata.
El proyecto de ley para ayudar a la recuperación en Texas -y particularmente en el área alrededor de Houston- también aumentaría temporalmente el límite de endeudamiento federal de Estados Unidos y mantendría al gobierno en funcionamiento durante los próximos tres meses.
El acuerdo, aprobado por 80 votos contra 17, desactiva la amenaza inmediata de un cierre del gobierno, pero el Congreso se enfrenta ahora a una fecha límite del 8 de diciembre para lograr otro acuerdo que evite un potencial acantilado fiscal.
El paquete de ayuda, casi el doble de la solicitud inicial de Trump, ahora va a la Cámara de Representantes, donde un grupo de más de 150 republicanos conservadores han anunciado su oposición al plan. Se espera una votación el viernes.
Después de la votación en el Senado de EEUU, Chris Murphy, un demócrata de Connecticut, declaró: “Nadie debería estar contento con lo que el Congreso hizo hoy”. En una declaración, dijo que el Congreso había logrado el “mínimo” y simplemente ” el camino “para las peleas futuras sobre la deuda estadounidense.
El miércoles, Trump se reunió con los líderes del Congreso de ambos partidos en la Oficina Oval. Los demócratas se fueron con Trump, que acordó una prórroga de tres meses sobre el techo de la deuda y la financiación del gobierno, una medida que enfureció al propio partido del presidente, que había propuesto una prórroga más prolongada.
El líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell, y el portavoz de la Cámara, Paul Ryan, han tratado de minimizar cualquier sugerencia de que fueron superados por sus homólogos demócratas, argumentando que el presidente había querido evitar una pelea partidista sobre el presupuesto federal mientras Texas comienza para recuperarse del huracán Harvey y de los llaves de la Florida para el huracán Irma.
Con información de The Guardian
