Un gran revuelo se generó en Alemania el día de San Valentín después de que una serpiente coral sudafricana de seis meses escapara de su terrario.
Preocupados por la cría de serpiente y el veneno potencialmente letal que contenía, sus propietarios se pusieron en contacto con los servicios de emergencia, lo que provocó la evacuación de 10 apartamentos en Colonia, Alemania.
El personal de Feuerwehr Köln asistió a la escena y publicó una descripción de la serpiente en Facebook. “El animal es una serpiente coralina sudafricana de seis meses. El animal mide aproximadamente 20 centímetros de largo y de pequeño diámetro”, se lee en el post.
Si bien puede parecer mucho ruido sobre una serpiente más pequeña que la regla promedio, cuando se trata del veneno de la serpiente de coral, siempre es mejor tener cuidado.
Estas serpientes venenosas pueden ser animales de mal genio y enojarse, extenderán su capucha y silbarán cuando se enfurezcan. No tienen miedo de golpear, pero, aunque no se aconseja estar en el extremo receptor de uno, a menudo golpean con la boca cerrada.
El veneno es energéticamente caro para los animales, lo que significa que quieren reservarlo para oportunidades en las que, de manera realista, podrían obtener una comida de él o morir si no despliegan su arma secreta.
Su coloración audaz es un indicador de su toxicidad, que mata fácilmente a lagartos y pequeños roedores, pero es menos probable que acabe con un humano adulto.
La amenaza para los humanos es menos clara con pocos casos documentados de envenenamiento, pero la experiencia ciertamente nunca es positiva.
Un informe de un caso publicado en 2019 detallaba a un hombre adulto que recibió mordeduras en ambas manos de una serpiente coral cautiva.
“Aproximadamente una hora después de recibir la picadura, desarrolló vómitos, insuficiencia respiratoria que requirió ventilación mecánica y parálisis de los músculos bulbares y de las extremidades superiores, con retención del control motor voluntario en las extremidades inferiores. Se brindó atención de apoyo y la parálisis y la insuficiencia respiratoria se resolvieron espontáneamente 12 horas después del inicio”, detalló el reporte.
Incidencias como esta significan que el veneno de la serpiente de coral se considera neurotóxico para los humanos, lo que requiere atención médica inmediata para cualquier persona que sea mordida.
Es comprensible, entonces, que el servicio de bomberos adoptó el enfoque que tomó en el caso, evacuando a los residentes de 10 apartamentos cercanos para reducir la probabilidad de un enfrentamiento.
En su publicación inicial, insistieron en que el animal no era tan peligroso como un adulto debido a su pequeño tamaño y su corta edad, pero independientemente se merecía un cuidado extremo, ya que no se podían descartar reacciones graves.
Afortunadamente, la búsqueda tuvo un final feliz para todos los involucrados, ya que la serpiente de coral “fue atrapada en el camino hacia una trampa de alimentación y ahora está a salvo en el terrario”, escribió Feuerwehr Köln en Facebook.
Con información de IFL Science
