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Propone Sheinbaum que la extorsión sea perseguida de oficio

CIUDAD DE MÉXICO.- El Gobierno federal enviará este martes a la Cámara de Diputados una iniciativa de reforma para que el delito de extorsión sea perseguido de oficio por el Estado mexicano, sin necesidad de que la víctima interponga una denuncia, informó la presidenta Claudia Sheinbaum.

El Estado asumirá la denuncia

Durante su conferencia matutina del lunes 8 de julio, Sheinbaum reconoció que, aunque la mayoría de los delitos han disminuido, la extorsión sigue en aumento, por lo que se impulsará una legislación específica: “La víctima ya no tendrá que cargar con el riesgo de denunciar. Ahora será el Estado quien lo investigue directamente”.

La propuesta establece que el delito de extorsión se incluirá en el artículo 73 constitucional, junto a crímenes como el secuestro, la desaparición forzada y la trata de personas, permitiendo expedir una Ley General contra la Extorsión. Esto también permitiría a las autoridades solicitar a las empresas telefónicas la cancelación inmediata de números utilizados para cometer el delito.

Ley General y coordinación nacional

La consejera jurídica Ernestina Godoy explicó que la iniciativa contempla herramientas de investigación más eficaces, con principios de coordinación institucional. “Buscamos facultar al Congreso para legislar en materia penal mínima en extorsión, como ya lo hace en delitos graves”.

Sheinbaum aclaró que las penas por este delito no se modificarán, pero su persecución será obligatoria para todas las fiscalías estatales: “Será un delito local, pero con obligación de perseguirse como un homicidio”.

Compromiso de recursos y apoyo a las víctimas

La mandataria aseguró que, si se requieren más recursos para aplicar la estrategia, estos serán otorgados: “Lo más importante es que quien sufra una extorsión sepa que no está solo. El Estado está para protegerlo y castigar a los responsables”.

La iniciativa marca un cambio clave en el combate a la extorsión, delito que afecta a millones de personas y que, hasta ahora, en muchos casos quedaba impune por el temor de las víctimas a represalias.