Tijuana, BC.- La Policía Estatal Preventiva no aprende y sigue extorsionando. Ahora fue el turno de una pareja de edad avanzada a la que privaron de la libertad durante más de 7 horas para exigirles 30 mil dólares.
Los hechos se registraron en los últimos días de diciembre pasado en el estacionamiento de un centro comercial en Otay, informó el abogado Humberto Valdez.
“A una pareja los levantaron, estuvieron 7 horas con ellos, de oficio panaderos pidiéndoles 30 mil dólares para soltarlos y casualmente uno de los detenidos que tenían ahí pudo comunicarse con su hija y su hija en ese momento estaba conmigo. Estaban en la Ley de Otay y sí llegué y oh sorpresa, ahí los tenían cual vil privados de la libertad, cual vil secuestro estaban pidiendo rescate” indicó.
En otro caso, dos jóvenes empleados del aeropuerto fueron las víctimas de la Policía Estatal Preventiva, que con el mismo modus operandi, exigían la misma cantidad para liberarlos.
A un par de jóvenes estudiantes universitarios les exigían dos agentes de la PEP, son varios pero firman el informe policiaco 2 o 4 agentes pero en realidad son más exigen cantidades de 30 mil dólares para liberarlos y si no a cambio les siembran armas o evidencia delictiva o droga y así se lo dicen a los familiares con ese cinismo.
Estos casos han sido hechos del conocimiento tanto del secretario de Seguridad Pública del estado, Gerardo Sosa Olachea como del director de la Policía Estatal Preventiva pero de ahí no pasan.
“Conozco a los agentes que estaban ahí, hice el aviso al señor director de la PEP, nunca me contestó, y cuando me contesto me dijo que no estuviera chingando, que me fuera a chingar a mi madre, demuestra que es un hampón, no podía ponerme al tú por tú con un hampón, en todo caso la justicia será a que se hará cargo de ellos” sostuvo Valdez.
Por lo anterior, las denuncias correspondientes fueron interpuestas ante las autoridades federales, agregó el entrevistado, quien precisó que el desempeño de la Policía Estatal Preventiva como un grupo delictivo en Baja California, es solapado desde el gobernador hasta los funcionarios del ramo de seguridad.
“Lamentablemente no existe el ánimo del señor gobernador ni del secretario de Seguridad Pública estatal de sanear esa dependencia, tenemos unos verdaderos hampones, unos delincuentes en esa corporación, te digo eso porque con pruebas en la mano han sembrado evidencia delictiva y están las pruebas en PGR, ahora Fiscalía General de la República, y yo tengo esos informes policiacos homologados” puntualizó el entrevistado.
Para los bajacalifornianos, presentar una denuncia contra la PEP es chocar contra un muro pues se les ponen obstáculos y piedras en el camino.
“La oficina de asuntos internos de esa dependencia no existe, nomás hay en Mexicali, la gente no va, si verdaderamente existiera una voluntad yo lo exhorto, señor secretario, a que las oficinas de Asuntos Internos se encuentren en Tijuana” aseveró.
Con información de Juan Arturo Salinas
