Tijuana, BC.- El centro de Tijuana sigue siendo presa de la delincuencia y esta vez los ladrones mantienen asolados los alrededores del parque Teniente Guerrero, como el caso de una sucursal de pinturas cuya cortina de estacionamiento fue forzada por los delincuentes.
El empleado de una tienda saqueada explica que “abrieron un boquete aquí, se brincaron del terreno de al lado y había unos palos y unos metales trataron de abrir todo no sé cuál era su intención pero nomas lograron abrir esto yo creo que por el tiempo también. Ya una vez en el interior abrieron tres carros, uno de la empresa el mío personal y el del dueño del edificio a mi carro le robaron el estéreo y le robaron otras cosas personas al carro de la empresa la batería y cosas que pudieran llevarse”.
Es muy amplio el catálogo de delitos perpetrados en el primer cuadro de Tijuana, calificado como blindado por deficientes mentales como el ex secretario de Seguridad Pública Alejandro Lares Valladares y el ex alcalde Jorge Astiazarán.
El señor Rigoberto Medina Castro, comerciante del área los enlista:
“Robos, cristalazos a los carros, robos a baterías, las personas les arrebatan las cadenas, si se descuidan la cartera también la tardecita, tarde noche, 6, 7, 8 de la noche, anoche estuvimos a oscuras, no prendieron las lámparas tres cuadras en el centro desde al parque a la Constitución, a oscuras y esta gente aprovecha, los negocios cerramos a las 6 y estamos alerta”.
Las víctimas de estos robos temen que los golpes se repitan pues los delincuentes ya conocen el camino pero sobre todo, saben que están protegidos pues los sujetos encarcelados son los vagos que se atraviesan frente a las patrullas, y no aquellos que perpetran los robos.
El empleado de la tienda saqueada lo explica.
– A mí se me hace que otra vez vienen y hacen lo mismo…
-Este dano no se hace en 5 minutos,
-Le calculo que fueron 2 horas porque son barrotes sólidos es un rollo abrir…de hecho tronaron el cabe de la alarma lo tronaron todo, lo quemaron con un encendedor para que no sonara nada.
La falta de vigilancia es más que evidente.
“Supuestamente en el parque hay una caseta de Policía pero ahí se la viven sentados en la noche no salen en el día pasan por su café al Oxxo y ya es cuando los veo y vivo aquí a un lado, aquí es la pasada como bajan a la estación pero como que anden rondando aquí tranquilos no” agrega el entrevistado.
