TIJUANA, Baja California.- La vida no le sonríe a Sonia Angélica López, a sus 28 años padece de insuficiencia renal crónica y se encuentra bajo tratamiento dialítico. Está luchando junto a su familia para salir adelante, pero sobre todo por sus dos hijos: un varón de siete años y una niña de cinco.
“Mi catéter que tengo en el estómago dejó de funcionar al grado de yo hincharme y se me pasó el agua a los pulmones y al corazón. Me tuvieron que operar de emergencia para ponerme el catéter aquí en el cuello para empezar hacer hemodiálisis porque me estaba ahogando”, detalló.
Los síntomas comenzaron hace dos años: fiebre, dolor de cabeza, tos, gripa, taquicardia; y sus defensas bajaron considerablemente.
“Al no contar con una fuente ingresos estoy dependiendo de mis papás, y esta enfermedad es muy cara. En eritropoyetina me inyecto dos capsulas, dos ampolletas cada tercer día. La caja nos cuesta 800 pesos y tiene seis nada más, se podría decir que 10 personas de las cuales estamos enfermas de insuficiencia renal solamente dos sobreviven y ocho mueren”, indicó.
Antes de enfermarse, Sonia se dedicaba a vender ropa por internet, que encontraba en los mercados sobre ruedas. Sin embargo, ahora ya no puede recorrer los puestos ambulantes para ayudar a su familia ni realizar alguna venta.
Todos los días tiene que estar a la deriva de si vivirá o no, así como tomar medicamentos, vitaminas, hierro y suplementos alimenticios.
Una cirugía de trasplante de riñón con valor de 35 mil dólares puede salvarle la vida, sin embargo, su familia no cuenta con el dinero para realizar dicha operación.
“Mi cirugía tiene que ser lo antes posible porque a mí ya me está creciendo el corazón al grado de que si sigue aumentando así ya no me puedo operar porque sería más delicado y perdería la oportunidad de poder realizarme el trasplante de riñón”, expresó.
El donante de riñón es su primo, ya han realizado rifas, kermes, venta de chocolates para recaudar la cantidad, pero es excesiva para sus posibilidades económicas, por lo que espera apoyo de la ciudadanía a que le ayuden a poder recaudar el dinero que le dé otra oportunidad de vida.
“Necesitamos de su ayuda porque esta enfermedad es muy fea y yo quiero ver crecer a mis hijos, y no quiero que pase más tiempo porque me estoy desgastando por dentro y yo no quiero dejar a mis hijos solos, quiero verlos crecer, darles una oportunidad de yo estar con ellos para que ellos estén grandes. Yo por eso pido apoyo a la ciudadanía, ya sea con un peso con lo que ellos me ayuden para poder solventar mi operación y salir adelante, porque realmente la operación sería una nueva vida para mí, sería un renacer de nuevo”, concluyó.
Para quien guste apoyarla se puede comunicar al teléfono 664-804-43-18 o al 664-438-56-74
Con información de Johanna Mejía.
