TIJUANA, B.C.- La población se encuentra poco preparada y se muestra insensible ante el tema del suicidio, al parecer el problema ha sido normalizado por la sociedad, y en lugar de apoyar busca hundir a quien enfrenta el problema, ya que en caso de identificar los factores de riesgo a tiempo, el suicidio podría prevenirse, pero hay muchos otros casos de suicidio que ni siquiera llegan a ser contabilizados porque deciden ocultarse, ya sea por temor o por el que dirán.
Entre los principales ejemplos de esta situación fue el reciente caso de una mujer que se lanzó del séptimo piso y quienes se encontraban cerca del lugar la incitaron a ello.
La psiquiatra, Graciela Jiménez señaló “Creo que me movió más, que personas estando viendo lo que iba a suceder al contrario alentaban, decían ya deja de estar haciendo tus payasadas, el drama y todo, realmente eso ocasiona más problema porque realmente estamos teniendo no conciencia de lo que está pasando, estamos normalizando algo que no debe de ser , no tenemos empatía como sociedad, entonces si debemos de tener esta apertura de poder llegar a mucha gente y explicar que una persona que está dolida, no necesita que otra le esté diciendo ese tipo de cosas o que no esté validando sus sentimientos, porque al contrario hay que ponernos en el lugar de esta persona desesperada por algo hizo lo que hizo y si le estamos diciendo aviéntate, entonces estamos afirmando que es lo que debería de hacer”.
De cada 10 pacientes que se atienden en consulta psicológica, alrededor de 7 han tenido en algún momento una ideación suicida.
El suicidio ha ido en incremento con los adolescentes por todo el proceso de cambio que esto implica y aunque no hay un factor que determine el porque ocurre un suicidio, la familia influye en esta toma de decisiones
Por su parte Yahvé García, Terapeuta señaló ” Está pasando por una serie de cambios desde físicos, hormonales, situacionales, el cambio por ejemplo de la secundaria a la preparatoria, el cambio que implica no lidiar con un solo maestro sino con siete, el cambio que implica ahora desplazarse solos a su lugar d estudios, todo esto implica que de repente el adolescente no tiene las herramientas que a lo mejor nosotros como adultos pudiéramos llegar a tener en algún momento para resolver y enfrentar ese tipo de situaciones”.
Es de suma importancia reconocer que hay intentos suicidas y como familia apoyar a aquellos miembros que pudieran padecer de algún trastorno y evitar fatalidades al desestimar sus pocas ganas de vivir.
Con información de Ivonne Hernández
