Después que se diera a conocer por una investigación realizada en Estados Unidos que agua mineral de manantial, Peñafiel contenía elevados niveles de arsénico en la bebida superando lo establecido como admisible en Estados Unidos, Profeco y Cofepris se dieron a la tarea de realizar muestras de calidad del agua que produce la empresa.
De acuerdo a versiones publicadas en diversos medios de información, esta marca ya contaba con una alerta roja emitida por parte de la Administración de Alimentos y Medicamentos FDA.
Entre las principales afectaciones que trae consigo el consumir agua en ese estado dependerá de las cantidades que se ingieran y puede ir desde daños leves como pudieran ser reacciones alérgicas, daños en el tracto digestivo, vómito, diarrea y en altas dosis puede ser letal.
Al respecto la compañía productora de la bebida decidió suspender de manera temporal la producción de agua mineral sin sabor, con el fin de garantizar la calidad de sus productos, en dos de sus instalaciones en México, a pesar de ello estas permanecerán trabajando en la realización de sus otros productos.
Por su parte la PROFECO se encuentra a la espera de los resultados de laboratorio del producto que se está distribuyendo con el fin de determinar que sea apto para consumirse, además de ello se hizo un requerimento de información a Peñafiel y contará con un periodo de tres días para responder si existe o no arsénico en el producto.
Con información de Ivonne Hernández
