Taxistas amarillos: de verdugos a víctimas

Tijuana, BC.- Un enfrentamiento entre bandos rivales del gremio de Taxis Amarillos, derivó en el choque entre los líderes Oscar Morales y Manuel Zavala,  con saldo de varios lesionados y el desalojo de Morales de su lugar de residencia, ubicada en el edificio Centenario.

Es una disputa de pillos contra pillos. De delincuentes contra delincuentes. Machetazo a caballo de espadas. El otrora poderoso gremio de taxistas amarillos se dividió y despojó a su ex poderoso líder Oscar Morales hasta del perico pues lo desalojaron no solo de sus oficinas sino de su vivienda, ubicada al interior del edificio ubicado en las inmediaciones de la garita de San Ysidro.
Oscar Morales, dirigente del gremio de  Taxistas Amarillos, se dolía de que “me sacaron a patadas  y ni el perro y el gato no me los dejaron llevar porque me dijeron que eran de ahí de las oficinas”.
Se trata del mismo líder  que hasta hace dos anos era señor de horca y cuchillo en la zona de la línea donde golpeaba, amenazaba y ni un taxi amarillo se movía sin su consentimiento, y cuyo abogado hoy apela a la ley.
Iván Arce, representante legal del gremio de Taxis Amarillos precisó que “no hemos tenido por ningún medio legal ninguna notificación …ahora sí que estamos en una ciudad sin ley, es una  controversia entre particulares…turnarlo a la autoridad correspondiente
Enfermo de cáncer en avanzada etapa,  según versiones extraoficiales, Oscar Morales  fue desalojado  no solo de sus oficinas sino de sus habitaciones en el edificio Centenario por el grupo comandado por su rival, Manuel Zavala y hoy pide justicia.
El dirigente de los Taxis Amarillos precisa que “lo que pasa es que el señor Manuel Zavala dirige un grupo que se salió de ahí de taxis amarillos para formar otro grupo, esos compañeros que se fueron son los que llegaron a causar los danos y ocasionaron el oficinas de e romper los vidrios, de robarse todo el dinero, de llevarse las máquinas y lo que hay en la oficina… de no intervenir en el problema, que se abstuvieran lejos o apartados del problema que no intervinieran ellos”.
Con información de Juan Arturo Salinas