La debilidad política de Theresa May fue expuesta brutalmente a Bruselas el lunes, cuando un acuerdo alcanzado entre Gran Bretaña y la UE para resolver el problema de la frontera irlandesa y pasar a la siguiente fase de las conversaciones del Brexit fue torpedeado por una llamada telefónica de última hora con el líder de el partido Unionista Democrático.
La confianza a primera hora del lunes de que un acuerdo estaba al alcance no dio resultado cuando, durante un almuerzo de trabajo con el presidente de la comisión europea, Jean Claude Juncker, May se vio obligada a detener las conversaciones del Brexit para recibir una llamada de Arlene Foster.
El líder unionista, cuyo partido actualmente proporciona a los conservadores una mayoría en los Comunes, le dijo a la primera ministra británica que no podía apoyar el compromiso planificado de Downing Street de mantener a Irlanda del Norte alineada con las leyes de la UE.
El desarrollo plantea nuevas preguntas sobre la capacidad de May para cumplir con cualquier acuerdo que proponga a los 27 estados miembros, y ha llenado a diplomáticos en Bruselas con un profundo presentimiento para futuras conversaciones, si se desarrollan en el nuevo año para tomar en la relación futura.
Los diplomáticos esperaban durante dos horas en una sala de negociación en la sede del Consejo de Ministros, para una reunión que se había planificado para seguir el almuerzo de Juncker-May. Cuando quedó claro que las dos partes no pudieron llegar a un acuerdo, los funcionarios fueron enviados a casa.
Juncker y May intentaron poner cara de valientes tras ell espectacular colapso de sus planes en declaraciones de prensa al final del día. El presidente de la comisión elogió a May por ser una “dura negociadora” que luchaba enérgicamente por los intereses de Gran Bretaña.
“En muchos de los temas hay un entendimiento común y, crucialmente, está claro que queremos avanzar juntos”, dijo May a los periodistas antes de insinuar que se necesitaban más conversaciones. “Hay un par de problemas, algunas diferencias permanecen, que requieren una mayor negociación y consulta. Y eso continuará, pero nos volveremos a reunir antes de que finalice la semana y también estoy seguro de que concluiremos esto de manera positiva “.
Con información de The Guardian
