Hace 15 años, decidió emprender con un negocio de tamales. Ahora es el vendedor más reconocido de la Colonia Cacho.
TIJUANA, Baja California.- Tras salir de Oaxaca y llegar a Tijuana, Reynaldo Ríos necesitaba cubrir sus gastos. Así, decidió emprender un negocio de tamales, adquiriendo sus habilidades en la Ciudad de México, donde aprendió a elaborar esta comida típica mexicana. Llegó a la ciudad fronteriza para ofrecer sus deliciosas tortas de tamal a los habitantes de Tijuana.
“Cuando empecé, lo hice con un triciclo, vendiendo por toda la colonia. Desde el correo, recorría toda la ruta hasta la antigua Visa Láser en Zona Río. Después, bajaba y principalmente anunciaba gritando ‘¡tamales, champurrado!’ para que la gente me conociera. Poco a poco me fui dando a conocer. La gente me decía que me buscaban calle por calle y no me encontraban. Decidí establecerme en un lugar fijo”, mencionó.
El negocio se ha convertido en una empresa familiar, ya que Reynaldo Ríos enseñó a sus hermanos a hacer tamales y ellos decidieron abrir su propio negocio. Sin embargo, su puesto en la Colonia Cacho fue el primero. Reynaldo Ríos reside en el Cañón de la Piedrera y cada mañana se levanta temprano para preparar los tamales.
“Estoy aquí a las siete de la mañana y termino alrededor de las 11 o 12. Me levanto a la una o dos de la mañana para prepararlos todos los días”, agregó.
Cuando Reynaldo Ríos llegó por primera vez, la gente no conocía las tortas de tamal. Hoy en día, estas son las favoritas de los habitantes de Tijuana, especialmente las de salsa verde.
Con información de Ixshel Gómez
