CIUDAD DE MEXICO (apro).- Estimado lector de la presente: si se admite que, según noticias de diversos medios de información, esta globalidad en la que nos movemos, es, más que otra cosa, una sociedad enferma, corrupta y corruptora, de muchedumbres solitarias, de la muerte de las verdades absolutas, lo que lleva a no pocos a la confusión o al temor e incluso a la desesperación, por lo que es lógico, creo, preguntarse cuál es el país que tiene más ciudadanos enfermos. A esa pregunta, considera servidor que es Estados Unidos.
Esa respuesta, lo admito, servidor no sabe si es propia o la ha sido sugerida por alguien de los medios, pero no ignora que responde muy bien al siguiente razonamiento. Según la célebre frase de Lord Apton, “el poder tiende a corromper, el poder absoluto corrompe absolutamente”, frase que, desgraciadamente, repito, la noticias diarias, han confirmado que es una verdad evidente en la globalidad en la que nos movemos y en la que, otra verdad evidente, es que el país más rico, más adelantado y más poderoso es Estados Unidos, pues las decisiones que toman sus hombres políticos, de las finanzas o los hombres dueños de sus complejos industriales, afectan a todo humano que respiramos en esta globalidad… e igualmente es el país en que no pocos de sus ciudadanos son los mayores consumidores de drogas, con lo que es el mercado más grande de las mismas… lo que genera, alimenta y robustece a la delincuencia internacional que trafica con toda clase de drogas, tanto de las más livianas como de las más duras, por lo que se puede decir que Estados Unidos, de manera inconsciente, si así se quiere ver, es el país más corruptor de la globalidad… pero ese es otro cantar, como dice el refrán, hecho que es difícil de aclarar en estos días de fin de las verdades absolutas y donde todo está sujeto al relativismo… a las percepciones de cada individuo, como ahora se dice… lo que está generando el peligro de que cada persona corra el peligro de convertirse en un presuntuoso… y ridículo… Humpty Dumpty, personaje creado por Lewis Carrol, autor de la aventuras de Alicia.
Ejemplo de lo confusas y hasta desorientadoras que pueden ser las denominadas percepciones, opina servidor, son las reseñas aparecidas en medios de comunicación con motivo de la muerte del dramaturgo estadunidense Edward Albee, ocurrida el pasado viernes de este 16 de septiembre, en las que se señala, sí, que su primera obra, “Historia del zoo”, ningún productor de su país quiso estrenarla, sin informar el porqué, y que esa pieza tuvo que esperar un año para estar en escena… en Alemania… esos mismos medios, en sus reseñas, se limitan a resaltar una faceta insistente en sus obras, el agobio que sufre el ser humano por los problemas que les produce la falta o la mala comunicación en el prójimo, y hacen hincapié en que sus piezas teatrales retratan la disgregación e incluso la degradación de la institución familiar, así como la incapacidad de la sociedad, del pueblo estadunidense, de analizarse objetivamente.
Todo lo expuesto hasta aquí, si a percepciones nos referimos, servidor cree que, repite, son confusas y hasta desorientadoras por insuficientes, por no decir a que se debe esa manera de escribir de E. Albee, como lo hace otra percepción, la de Geneviéve Serreau, en su libro “Historia del nouveau theatre”, donde percibe que la obra de E. Albee “atestigua una frustración social sin precedentes… resultado de vivir en una civilización donde reina el culto al dinero y al terrible Mammon, donde el éxito se convierte en santificación y el fracaso en pecado, donde hasta los sueños –de pureza, de felicidad– se recuperan y redistribuyen como productos de consumo… es Albee, junto a otros autores… en el que los fracasos neuróticos individuales constituyen las más violentas de las requisitorias contra el conformismo del american way of life”, que el país más rico y poderoso del mundo, Estados Unidos, está imponiendo al mundo como modelo universal de la felicidad tras la segunda Guerra Mundial.
Estimado lector: ante tantas percepciones posibles, usted percibirá cuál de las tantas y variadas percepciones es la más cercana a la realidad… y después de pensarlo bien… le pido, por favor… que perciba si servidor está o no cercano a los hechos cuando tiene la percepción de que Estados Unidos, por ser los más poderosos de la globalidad a la que mueve por ello, es el país más enfermo, corrupto y corruptor de la misma… como lo demuestra que tantos de sus ciudadanos hayan hecho el mercado más grande del consumo de la droga… con lo que… lo quiera o no… genera, alimenta y robustece la delincuencia internacional de los traficantes de la misma… ¿cuál es su percepción en relación a la de servidor?
Rogando a Dios que no nos dije extraviarnos en las mentadas percepciones, estimado lector de la presente.
