Donald Trump ha hecho una amenaza al ex director del FBI James Comey en Twitter el viernes por la mañana infiriendo que puede denunciarlo
Trump hizo una amenaza al ex-director del FBI cuando twitteó: “A James Comey más le vale esperar que no haya ‘cintas’ de nuestras conversaciones antes de que comience a filtrar información a la prensa!”
El tweet del presidente sugiere que había grabado en secreto las reuniones de la Casa Blanca, después de que el New York Times informó que exigió “lealtad” a Comey
El tweet, que sugiere que Trump ha grabado secretamente las reuniones de la Casa Blanca, se produjo después de que el New York Times informara que el presidente exigió la “lealtad” de Comey en una cena privada celebrada poco después de que Trump asumiera el cargo.
Los portavoces de la Casa Blanca no respondieron inmediatamente a las solicitudes de comentarios sobre si el presidente posee grabaciones de su cena con Comey o cualquier conversación con él.
Comey, que supervisaba una investigación sobre los supuestos vínculos entre la campaña de Trump y Rusia durante las elecciones de 2016, fue despedido el martes en un anuncio sorpresivo.
Trump se contradice una y otra vez
La Casa Blanca afirmó inicialmente que Comey fue despedido por recomendación del subdirector general Rod Rosenstein, que estaba insatisfecho con el manejo de Comey del escándalo de los correos electrónicos de Clinton. Pero Trump más tarde admitió que era enteramente su decisión y dijo que “esta cosa de Rusia” tuvo influencia en ello.
La historia constantemente cambiante de la Casa Blanca sobre el despido de Comey alimentó la controversia mientras los funcionarios de la administración que inicialmente siguieron la línea de Rosenstein tuvieron que confrontar la declaración de Trump en una entrevista con NBC.
-Yo iba a despedir a Comey -dijo Trump-. “Fue mi decisión. Iba a despedir a Comey“.
La mención de cintas sólo alimentará más comparaciones con Richard Nixon y el escándalo de Watergate. Nixon grabó las reuniones en la oficina oval y las grabaciones de esas reuniones llevaron a su dimisión de la oficina.
Michael Beschloss, un destacado historiador presidencial, dijo el viernes en Twitter: “Se supone que los presidentes han dejado de grabar rutinariamente a los visitantes sin su conocimiento cuando el sistema de grabaciones de Nixon fue revelado en 1973.”
Con información de The Guardian
