Los abogados que actúan para el informante que denunció a Donald Trump por solicitar ayuda extranjera para su campaña de reelección, han advertido que la seguridad personal de su cliente está en peligro, en parte como resultado de los comentarios del presidente.
Después de hacerlo, Trump continuó atacando al informante en Twitter y también sugirió que arrestaran al presidente del comité de inteligencia de la Cámara por traición.
Andrew Bakaj, el abogado principal del funcionario de inteligencia no identificado que hizo sonar la alarma sobre la conducta de Trump en relación con Ucrania, expresó el temor el domingo de que el informante podría ser puesto en “peligro” si su identidad se hiciera pública.
En una carta al director interino de inteligencia nacional, Joseph Maguire, Bakaj señaló directamente las agresivas declaraciones de Trump que, según dijo, provocaron “preocupaciones por la seguridad de nuestros clientes”.
La carta cita los comentarios de Trump el jueves al personal de la misión estadounidense en la ONU en Nueva York. En sus comentarios, hechos a puerta cerrada pero filtrados por el New York Times, el presidente hizo una amenaza poco velada que mostró desdén por las protecciones institucionales otorgadas a los denunciantes bajo la ley federal.
“Quiero saber quién es la persona que le dio la información al informante porque eso es básicamente un espía”, dijo Trump. “¿Sabes lo que solíamos hacer en los viejos tiempo? Con espías y traición, ¿verdad? Solíamos manejarlos un poco diferente de lo que lo hacemos ahora ”.
Bakaj dijo que la naturaleza indirecta del comentario de Trump al referirse a la persona que alimentó al denunciante la información “no hace nada para calmar nuestras preocupaciones por la seguridad de nuestros clientes”. El abogado agregó que las personas también estaban ofreciendo recompensas de $ 50,000 por información que saldría del oficial de inteligencia.
En una carta de acompañamiento a los principales líderes demócratas y republicanos en la Cámara y el Senado, Bakaj hizo un apasionado alegato a los líderes políticos de ambos partidos para que “se pronunciaran a favor de la protección de los denunciantes”.
Con información de The Guardian
