Donald Trump ha reprendido públicamente a Theresa May por su crítica a la propaganda antimusulmana, al abrir una disputa diplomática extraordinaria entre los aliados transatlánticos.
“Theresa @ theresamay, no se concentre en mí, concéntrese en el destructivo Terrorismo Radical Islámico que está teniendo lugar dentro del Reino Unido”, escribió el miércoles el presidente de Estados Unidos. “¡Estamos bien!”
El mensaje de Trump se produjo en respuesta a las críticas del portavoz de la primera ministra británica sobre la republicación del presidente de videos incendiarios publicado por el vicepresidente de un grupo de extrema derecha británico.
Sin embargo, la cuenta de Twitter “@theresamay” que Trump apunta no pertenece a la primera ministra británica, sino a una mujer llamada Theresa Scrivener. Minutos después Trump borró y volvió a publicar el tweet, esta vez con el identificador correcto: @Theresa_May.
La diatriba furiosa, que coronó uno de los días más díscolos de la presidencia de Trump, recibió una rápida renuncia del senador estadounidense Orrin Hatch de Utah, que se reunió en mayo en Downing Street para discutir las amenazas terroristas a ambos países. Tuiteó: “La PM @theresa_may es una de las grandes líderes mundiales, tengo un amor y un respeto increíbles por ella y por la forma en que lidera el Reino Unido, especialmente frente a la turbulencia”.
May, que se encuentra en Jordania como parte de una gira por Medio Oriente, no respondió de inmediato a la reprimenda personal de Trump. Ella va a pronunciar un importante discurso el jueves que detalla sus esperanzas de aumentar la influencia del Reino Unido en la región después del Brexit.
Pero su viaje, durante el cual May también visitó Arabia Saudita e Iraq, la primer líder británica en hacerlo en casi una década, está siendo ensombrecido por las preguntas sobre el comportamiento de Trump. Los funcionarios de May declinaron solicitudes reiteradas el jueves por la mañana para una respuesta al nuevo tweet.
Se espera que la primera ministra aborde el tema en preguntas después de su discurso, que abordará la participación del Reino Unido en la seguridad en Oriente Medio, incluida la capacitación de las fuerzas iraquíes para limpiar Mosul y Raqqa de los artefactos explosivos dejados por el EI mientras huía, y más asistencia de seguridad para Jordania.
Con información de The Guardian
