Donald Trump dejó deslizar el lunes un anuncio largamente esperado para enfrentar la crisis de la adicción a los opiáceos declarándola emergencia nacional. También sugirió que su elección para liderar la Oficina Nacional de Política de Control de Drogas podría estar bajo revisión.
Más de dos meses después de que Trump dijo en su club de golf Bedminster, New Jersey, “la crisis de opiáceos es un problema”, el presidente dijo que probablemente la declararía oficialmente una emergencia nacional con un evento la próxima semana.
Al hablar en una conferencia de prensa de Rose Garden con el líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell, Trump dijo: “Vamos a tener un gran anuncio, probablemente la próxima semana, sobre la crisis de las drogas y el problema masivo de opiáceos”.
Agregó: “Este país y, francamente, el mundo tiene un problema de drogas … y vamos a hacer algo al respecto”.
Las sobredosis de drogas debidas al uso de opiáceos aumentaron 21% en 2016; 64,070 estadounidenses murieron como resultado del uso de opiáceos en el último año. En el camino de la campaña, Trump habló sobre la lucha contra la adicción a los opioides. Él ha promocionado su muro fronterizo entre Estados Unidos y México como una forma de combatirlo.
Trump también mencionó el tema del congresista de Pensilvania Tom Marino, su elección para un puesto informalmente conocido como “zar antidrogas”.
Marino fue objeto de un informe conjunto del Washington Post y del programa 60 minutes el domingo sobre su papel como patrocinador de un proyecto de ley que, según los críticos, socavó los esfuerzos federales de aplicación de la ley contra la epidemia de opiáceos. El proyecto de ley hizo mucho más difícil para la DEA tomar medidas drásticas contra las compañías farmacéuticas que realizaron envíos sospechosos de opiáceos.
Aunque llamó a Marino “un buen tipo” el lunes, agregó: “Vi el informe. Vamos a ver el informe. Lo tomaremos muy en serio “.
El presidente dejó abierta la posibilidad de retirar la nominación de Marino. Trump dijo que planeaba hablar con Marino pronto.
Él dijo: “Si creo que es un 1% negativo para hacer lo que queremos hacer, haré un cambio”.
El senador Joe Manchin, de Virginia Occidental, un demócrata conservador en un estado devastado por la adicción a los opiáceos, ha pedido a Trump que retire la nominación de Marino.
Con información de The Guardian
