Un héroe en su propia mente

En su calidad de héroe en su propia mente, el ex gobernador Rafael Moreno Valle se encuentra en plena campaña y no le importa presumir sus logros a costa de haber hipotecado a Puebla durante los próximos 50 años y de haber gobernado como un fascista que hoy se promociona, un verdadero lobo con piel de oveja.

Con un derroche en espectaculares y en una autopromoción fastuosa, al grado de pautar sus spots en una reciente pelea de box, el ex mandatario panista busca que todo México olvide que gobernó como un verdadero dictador que condujo a Puebla a la debacle.

- Publicidad-

Para encubrir que sus grandes avances eran en realidad una escenografía de cartón, Moreno Valle mintió al ocultar los montos de su deuda, los cuales reveló solo hasta que concluyó su cargo en marzo pasado: 38 mil 944 millones de pesos, monto pagadero a más de 8 sexenios, lo que significa empeñar el futuro de varias generaciones de poblanos.

Todo un represor al que no le importó que la sangre llegara al río, Rafael Moreno encarceló líderes sociales, entre transportistas, mototaxistas, a los defensores de la Pirámide de Cholula donde quiso construir un parque rechazado por la comunidad, y otros, pero la mancha más negra que el ex mandatario quiere lavar a punta de millones fue su Ley Bala que provocó la muerte del niño José Luis Tlehuatle Tamayo, en Chalchihuapan.

Su tenebrosa ley permitía el uso de armas supuestamente no letales en el control de protestas, pero resulta que un menor perdió la vida en el primer encontronazo entre las fuerzas de seguridad y los manifestantes.

- Publicidad -

Político voraz, logró aprobar una ley de expropiación que le permitiera agilizar obras privatizadoras y despojar de sus tierras a particulares y comunidades enteras, sin necesidad de audiencia con los propietarios de los predios que se le antojaba.

A su falta de sensibilidad social, Moreno Valle sumó sus nulas habilidades como administrador, pues la fórmula de los Proyectos para la Prestación de Servicios, solo sirvió para enriquecer a empresarios millonarios con obras que los poblanos pagan más caras a largo plazo.
Como neoliberal, privatizó el agua mediante una ley que concesionó a empresas este servicio al punto en que las tarifas se dispararon hasta 500 por ciento, y le abrió la puerta a un sistema de participación empresarial para dotar a 17 municipios de alumbrado público, solo que con una deuda de 200 millones de pesos. Hoy en día, varios de estos municipios rescindieron el convenio con las empresas beneficiadas por incumplimiento del servicio, que los mantiene a oscuras.
No es casual que uno de los beneficiados de esta red de complicidades sea el ex secretario de Hacienda Pedro Aspe, quien a través de un fideicomiso operado por la empresa Evercore, maneja la deuda de Puebla.

- Publicidad -

Aliado del priismo más turbio, Moreno Valle benefició a empresas constructoras ligadas a Carlos Salinas en su afán de contar con el respaldo de los gobiernos neoliberales que más han dañado a nuestro país.

Su libro “La fuerza del Cambio” es una alabanza en boca propia y por tanto un vituperio, presentado en una fastuosa ceremonia con la ostentosidad que lo caracteriza, y que lejos de plantear un proyecto de país es la visión de un déspota y ególatra.

En sus delirios, Moreno Valle es puede decir barbaridades, pero por sus resultados conocemos a un político, el México que quiere es un país endeudado y regido bajo la fuerza de las armas, gobernado por una persona que se cree un monarca. En otras palabras es un héroe en su propia mente.