Una semana después del derrumbe mortal de una presa minera en el estado brasileño de Minas Gerais, docenas de personas rindieron homenaje a las 110 víctimas asesinadas y 238 que siguen desaparecidas, mientras que las imágenes de video recién publicadas mostraron el momento en que una poderosa ola de desechos comenzó a barrer todo a su paso.
Se llevó a cabo una ceremonia en el lugar del desastre alrededor de la 1 p.m. hora local, la hora a la que se rompió la represa el 25 de enero, desatando un torrente destructivo de desechos mineros de color marrón rojizo.
Las retroexcavadoras dejaron de cavar en el lodo y los rescatistas que buscaban sobrevivientes en los gruesos relaves de las minas miraron hacia el cielo mientras 10 bomberos y helicópteros de la policía lanzaban pétalos de flores en el complejo minero de hierro.
Un sacerdote también dio una breve misa frente a una cruz rosa alta que había sido plantada en el barro.
“Está totalmente devastado, parece que ha habido una guerra”, dijo Edvan Cristi, de 23 años, quien perdió amigos que trabajaban en la mina.
En un video obtenido por la Associated Press, se puede ver a los autos conduciendo desesperadamente tratando de escapar mientras se aproxima un chorro de lodo con una fuerza dramática.
Los relaves, que contienen niveles tóxicos de óxido de hierro, revistieron 623 acres de Brumadinho y el río Paraopeba.
Vale SA, la compañía que dirigió y operó la represa, dijo que los residuos no tenían niveles peligrosos de metales, pero los expertos argumentan que el impacto en el medio ambiente podría ser irreversible.
Las autoridades y organizaciones ambientales han comenzado a probar la calidad del agua alrededor del complejo minero, mientras que las autoridades estatales y federales han dicho a los residentes que se abstengan de usar el agua directamente de la Paraopeba o de 100 m alrededor.
El río Paraopeba fluye hacia el mucho más grande río Sao Francisco, que también podría estar contaminado.
Cientos de municipios y ciudades más grandes como Petrolina, a 1.400 km (870 millas) de Brumadinho, obtienen agua potable del río Sao Francisco.
La ola de lodo se está moviendo actualmente hacia Sao Francisco a aproximadamente 1kph (.62 mph), pero los funcionarios esperan que la represa hidroeléctrica Retiro Baixo y el complejo de plantas a unos 300 km (185 millas) de Brumadinho eviten que el lodo lo contamine.
Se espera que las colas alcancen la presa Retiro Baixo entre el 5 de febrero y el 10 de febrero.
