UNICEF advierte sobre la creciente violencia contra las niñas en México

Un informe del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) advierte que la violencia familiar contra las niñas en México aumentó considerablemente entre 2010 y 2014.

Según el estudio, 18,000 niñas fueron víctimas de abuso familiar en 2010, una cifra que aumentó a 24,000 en 2014.

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En 2015, casi 700,000 niñas adolescentes de entre 15 y 17 años sufrieron abusos familiares.

En la presentación del estudio, Christian Skoog, de UNICEF México, calificó la situación de “alarmante” y dijo que mejorar los datos sobre la violencia contra los niños es una parte importante para abordar el problema.

“La violencia afecta a todos los menores, sin importar su condición”, dijo. “En ese sentido, la falta de datos reduce la probabilidad de que se restituyan sus derechos”.

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Oscar Jaimes Bello, director del instituto nacional de estadísticas (Inegi), estuvo de acuerdo con Skoog en que las estadísticas actuales sobre la violencia contra los niños son insuficientes.

“Hay información estadística sobre la violencia contra niños, niñas y adolescentes, que nos permite medir algunos de los patrones, de una manera muy general”, dijo. “Sin embargo, la disponibilidad y desagregación de los datos limita la capacidad de entender y medir el problema”.

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En general, la violencia familiar afecta mucho más a las niñas que a los niños.

El estudio encontró que 1,468 menores fueron asesinados en 2017, frente a 1,126 en 2016. En 2017 había 5,790 niños desaparecidos, 60% de los cuales eran niñas.

El estudio también encontró que el 63% de los niños menores de 14 años habían experimentado algún tipo de disciplina violenta en el mes anterior a la encuesta. Las formas más comunes fueron el castigo psicológico y corporal.

El mayor porcentaje de actos de disciplina violenta fueron llevados a cabo por hermanos, que representan el 28%, seguidos por las madres, el 24% y los padres, el 20%.

“La violencia contra los niños en el hogar se ha naturalizado”, dijo Skoog. “Nuestra sociedad cree que no hay nada de malo en golpear o maltratar a un niño por algo que él o ella ha hecho”.