El Vaticano ha renunciado a la inmunidad diplomática de su enviado a Francia, que está bajo investigación por agresión sexual.
La medida, una indicación del enfoque más duro del Vaticano ante la conducta indebida y el abuso sexual, allana el camino para que el arzobispo Luigi Ventura, el nuncio apostólico, enfrente cargos criminales.
Ventura, de 74 años, está acusado de abusar sexualmente de un empleado de las autoridades de la ciudad de París durante una recepción de año nuevo en la que Anne Hidalgo, la alcaldesa de París, se dirigió a diplomáticos, líderes religiosos y figuras de la sociedad civil. Las autoridades parisinas llevan varios meses investigando la denuncia.
Según una fuente judicial, “durante la ceremonia, un empleado de la ciudad fue manoseado varias veces en la parte de atrás, en tres casos, una vez frente a un testigo”.
En marzo, Nathalie Loiseau, ministra de asuntos europeos de Francia, instó al Vaticano a que suspendiera la inmunidad.
“En este punto, [Ventura] se beneficia de la inmunidad diplomática, pero la Santa Sede es claramente consciente de las graves acusaciones que se han presentado contra el nuncio apostólico y no dudo ni un segundo que la Santa Sede hará lo correcto. “, Dijo Loiseau.
El lunes, Alessandro Gisotti, el jefe interino de comunicaciones del Vaticano, confirmó que la inmunidad del arzobispo había sido suspendida.
“Puedo confirmar que la Santa Sede renuncia a la inmunidad jurisdiccional de la que goza el nuncio apostólico en Francia, Mons. Luigi Ventura, en virtud de la convención de Viena del 18 de abril de 1961 sobre relaciones diplomáticas, para los procesos penales que lo afectan”, dijo.
Al describir la medida como “un gesto extraordinario”, Gisotti dijo que Ventura había aceptado “colaborar de manera plena y espontánea con las autoridades judiciales francesas”.
Después de que se hiciera una acusación inicial en Ventura en marzo, un segundo hombre afirmó que el diplomático lo había molestado en Canadá en 2008. Christian Vachon alegó que Ventura tocó sus nalgas al menos dos veces durante un banquete celebrado en la Basílica de Sainte-Anne-D Beaupré, cerca de Quebec.
Según la convención de Viena, la inmunidad diplomática exime a los enviados estatales de juicios o procesos judiciales en su país anfitrión. En circunstancias especiales, como un delito grave, la protección puede ser eliminada por el país de origen del diplomático.
El Vaticano se ha enfrentado a una oleada tras otra de escándalos relacionados con el abuso sexual y la mala conducta, y ha sido acusado de encubrimiento y laxitud.
