TIJUANA, Baja California.- Después de dos años de los derrumbes de casas en Lomas del Rubí, aun hay familias que viven en la zona entre calles destruidas y con el riesgo de que sus hogares se desplomen con las próximas lluvias o a consecuencia un sismo inesperado.
Por la situación en la que viven los pocos vecinos que quedan en Lomas del Rubí, la sindico procuradora, María del Carmen Espinoza Ochoa, atendió las quejas y peticiones de los residentes para canalizarlas a las dependencias correspondientes.
Una de las vecinas afectadas indicó que los habitantes de la zona de riesgo tuvieron que improvisar escaleras de madera para que personas de la tercera edad puedan llegar hasta sus casas. De igual manera, instalaron sobre las banquetas tubos que llevan agua potable a los hogares.
La síndico procuradora señaló que mantendrá los vínculos de comunicación con los vecinos afectados para dar con los funcionarios y exfuncionarios que autorizaron a Grupo Melo los movimientos de tierra que ocasionaron la pérdida de más de 160 predios.
La funcionaria declaró que intensificará los esfuerzos de la dependencia a su cargo para ayudar a los vecinos afectados por los derrumbes.
Con información de: Miguel Martínez
