El asediado gobierno de Nicolás Maduro declaró al embajador alemán persona non grata y le ordenó que abandone el país en un plazo de 48 horas, ya que la crisis política de Venezuela se intensificó el miércoles.
La decisión de expulsar a Daniel Kriener, quien reside en Caracas desde el año pasado, fue anunciada en Twitter por el ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Jorge Arreaza.
Arreaza dijo que la decisión se basó en los “repetidos actos de injerencia en los asuntos internos del país” de Daniel Kriener.
En una declaración, el gobierno de Maduro acusó a Kriener y al gobierno alemán, que fue uno de los que reconocieron al rival de Maduro, Juan Guaidó como el legítimo líder de Venezuela el mes pasado, de “injusticia” e intromisión en los asuntos venezolanos.
“Como resultado, Kriener tiene un plazo de 48 horas para abandonar el territorio de la República Bolivariana de Venezuela”, agrega el comunicado.
La oficina extranjera alemana dijo: “Podemos confirmar que el embajador Daniel Kriener ha sido declarado” persona non grata “. Actualmente estamos deliberando sobre otros pasos, incluso con nuestros socios en el terreno “.
El ministro de Relaciones Exteriores de Alemania, Heiko Maas, condenó lo que llamó “una decisión incomprensible” que agravaría aún más la situación en Venezuela. Maas dijo que estaba llamando al embajador “para consultas” y que Alemania continuaría apoyando a Guaidó.
Kriener, de 58 años, se encontraba entre un grupo de diplomáticos extranjeros que viajaron el lunes al aeropuerto internacional principal de Venezuela para saludar a Guaidó, mientras regresaba al país luego de una gira por Sudamérica.
“Creemos que en este momento podemos ayudar para que haya un acuerdo político negociado para la crisis aquí en Venezuela”, dijo a los periodistas en el aeropuerto Simón Bolívar, al norte de Caracas.
La fricción entre Maduro y los diplomáticos europeos ha estado creciendo desde el 10 de enero cuando los embajadores con sede en Caracas, incluidos Kriener y su homólogo británico, Andrew Soper, boicotearon la ceremonia de inauguración del disputado segundo mandato de Maduro.
Las tensiones se intensificaron el mes pasado cuando países europeos como el Reino Unido, España, Francia, Alemania, Suecia y Dinamarca reconocieron oficialmente a Guaidó como presidente interino de Venezuela después de que Maduro ignorara los pedidos de nuevas elecciones presidenciales.
El legislador opositor Omar Barboza, quien se dirigió a una sesión de la asamblea nacional controlada por la oposición de Venezuela el miércoles, dijo que la decisión reflejaba “la profundización del comportamiento totalitario” del gobierno de Maduro y merecía una condena.
Estados Unidos, el patrocinador más importante de Guaidó, incrementó su presión sobre Maduro el miércoles cuando el asesor de seguridad nacional de Donald Trump, John Bolton, advirtió a los bancos extranjeros y las instituciones financieras que no hicieran negocios con el hombre fuerte de Venezuela.
“Estados Unidos está avisando a las instituciones financieras extranjeras que enfrentarán sanciones por participar en la facilitación de transacciones ilegítimas que benefician a Nicolás Maduro y su red corrupta”, dijo Bolton en un comunicado.
