Un aparente golpe de Estado se ha anulado en Venezuela, luego de que un pequeño grupo de hombres vestidos como soldados atacaran una base del ejército, declarándose en rebelión contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro.
Remigio Ceballos, comandante estratégico de las fuerzas armadas, twitteó el domingo que siete personas habían sido arrestadas. Los informes de los medios locales de dos muertos no pudieron ser confirmados inmediatamente.
El líder del partido gobernante de Venezuela, Diosdado Cabello, informó por primera vez el ataque a la base de Fort Paramacay cerca de la ciudad de Valencia a través de Twitter el domingo. Dijo que la situación había sido controlada por tropas leales al gobierno socialista, que ha sido objeto de una condena generalizada por los movimientos vistos como intentos de fortalecer su control sobre el poder.
Ceballos dijo que las fuerzas armadas repelieron rápidamente el ataque “terrorista, criminal y paramilitar”.
El general Suárez Chourio, jefe del ejército, dijo en una declaración en video de la base Paramacay que los atacantes fueron “detenidos y derrotados” y que “la paz ha triunfado”.
Sin embargo, los informes de la televisión local transmiten imágenes de la base durante toda la mañana, con explosiones esporádicas oídas en la distancia. Los civiles cerca de la base se derramaron en las calles en aparente apoyo a las tropas disidentes. Se registraron enfrentamientos menores entre los civiles y las unidades de guardias nacionales afuera de la base.
Un hombre que se identificó como el capitán Juan Caguaripano estaba flanqueado por una docena de hombres en uniforme, algunos con rifles de asalto, mientras declaraba una rebelión contra Maduro.
“Esto no es un golpe de Estado”, dijo. “Esta es una acción cívica y militar para restablecer el orden constitucional. Pero más que eso, es para salvar al país de la destrucción total.
“Exigimos la formación inmediata de un gobierno de transición”.
Imágenes en directo de edificios residenciales frente a la base de Paramacay mostraron helicópteros militares y civiles volando sobre áreas boscosas. A la distancia se oían varias detonaciones. Hubo una especulación generalizada sobre la naturaleza de los acontecimientos.
“Hay dudas considerables sobre si esto es promovido de alguna manera por el gobierno como una excusa para una represión o si es completamente genuino”, dijo Phil Gunson, analista de Venezuela para el International Crisis Group.
La aparente rebelión tuvo lugar un día después de la sesión inaugural de una nueva asamblea constituyente superpotente, que docenas de países y la oposición venezolana han calificado de ilegítima y dice que sólo sirve para apoyar una “dictadura” de Maduro al pasar por alto la legislatura controlada por la oposición.
Con información de The Guardian
