Los gobiernos estatales y municipales de Veracruz han sido acusados de malversación de más de 33 mil millones de pesos entre 2007 y 2017.
Durante el período de 10 años, la Oficina del Auditor de Veracruz (Orfis) presentó 158 denuncias penales contra alcaldes y funcionarios estatales y municipales debido a irregularidades financieras que detectó en las cuentas públicas.
Sucesivas administraciones del Partido Revolucionario Institucional (PRI), dirigidas por Fidel Herrera Beltrán y posteriormente Javier Duarte gobernaron Veracruz durante casi todo el período al que se refieren las quejas.
Duarte fue condenado el mes pasado a nueve años de prisión por lavado de dinero y asociación criminal, mientras que su antecesor también fue acusado de corrupción.
Los funcionarios del gobierno estatal están acusados de malversar alrededor del 97% de los 33 mil millones de pesos que faltan, pero un mayor porcentaje de las denuncias penales, 100 de 158, están en contra de sus homólogos municipales.
Casi el 93% de los fondos faltantes se detectaron en auditorías de cuentas públicas para 2015 y 2016, los últimos dos años del período de seis años de Duarte.
Si bien el PRI lidera el camino en cuanto a la cantidad de denuncias contra sus funcionarios, ningún partido político que mantuvo el poder en Veracruz a nivel municipal durante el período de tres años más reciente no se ha visto afectado por las acusaciones de corrupción.
Los alcaldes de 153 de los 212 municipios del estado están acusados de desviar recursos ilegalmente solo en 2017: 71 representaron al PRI; 29 ocupó cargos para el Partido Acción Nacional; y 22 para el Partido de la Revolución Democrática.
Los otros pertenecían a otros cuatro partidos más pequeños.
Las administraciones municipales, que estuvieron en funciones entre 2014 y 2017, supuestamente han malversado más de 1.100 millones de pesos de dinero público el año pasado.
Según los datos de Orfis, la supuesta malversación municipal del año pasado es la más alta que jamás se haya registrado.
La cifra de 1.100 millones es cinco veces mayor que todo el presupuesto que la Secretaría de Administración Pública (SFP) tiene este año para combatir la corrupción.
Se cree que los fondos se desviaron a través de sobrepagos a contratistas para obras públicas, a través de otros pagos para los cuales no existen registros o simplemente al no pagar a los proveedores y otros acreedores del gobierno y tomar el dinero adeudado.
Con irregularidades que suman más de 142 millones de pesos, el gobierno municipal de Coatzacoalcos, encabezado por el alcalde del PRI, Joaquín Caballero Rosiñol, está acusado del mayor desvío de recursos el año pasado, seguido de las administraciones de Acayucan y San Andrés Tuxtla, gobernadas hasta 2017 por una alternativa. Veracruzana y alcalde del PRI respectivamente.
Sin embargo, Orfis aún no ha presentado ninguna denuncia penal contra funcionarios municipales por las irregularidades del año pasado. Los ex alcaldes y ex funcionarios acusados de desviar los recursos deben tener la oportunidad de proporcionar documentación que justifique el uso del dinero o devolverlo.
Con información de Mexico News
