Rusia rechaza las preocupaciones sobre el veto electoral a Navalny

Rusia rechazó las preocupaciones de que una decisión de impedir que el crítico del gobierno Alexei Navalny compita contra Vladimir Putin en las elecciones presidenciales de marzo próximo podría socavar la legitimidad del voto, ya que el Kremlin insinuó represalias en respuesta a los llamados de la oposición a un boicot de las urnas.

El comité electoral de Rusia dictaminó el lunes que Navalny no debería ser elegible para un cargo público hasta al menos 2028 debido a una condena anterior por fraude. Navalny, quien pasó el último año llevando a cabo una campaña electoral de base en todo el país, dijo que los cargos que llevaron a su condena fueron inventados para evitar que desafíe a Putin. Dijo que pediría a sus 200,000 voluntarios de la campaña que desviaran sus esfuerzos para convencer a los rusos de boicotear las elecciones y también pidió protestas en todo el país.

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“Vladimir Putin está muy conmocionado. Teme competir conmigo “, dijo Navalny en una dirección de video en línea. “Lo que nos están ofreciendo no puede llamarse elecciones. Solo participan Putin y los candidatos que él ha seleccionado personalmente, aquellos que no representan ni la más mínima amenaza para él. Ir a la mesa de votación ahora es votar por mentiras y corrupción “.

Putin, que ha estado en el poder durante 18 años, fue un notable ausente en su nominación oficial para la reelección en Moscú el martes. El presidente ruso fue presentado como candidato a las elecciones en un evento cubierto en el parque VDNKh de la era soviética, en expansión en el norte de Moscú. El Kremlin citó el horario de trabajo de Putin como el motivo por el cual no asistió.

Al evento de nominación asistieron más de 650 invitados, incluidas estrellas del deporte y figuras culturales. El fondo del escenario era un gigantesco mapa de Rusia estampado con las palabras: “Un presidente fuerte. Una Rusia fuerte “. Putin pasó la tarde del martes reuniéndose con los niños en un evento tradicional de temporada festiva en el Kremlin.

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Con información de The Guardian