SAN DIEGO, California.- La denuncia presentada el pasado jueves 10 de octubre contra una guardería en San Diego por presunto abuso de los menores ha procedido, luego de que varias visitas sorpresa mostraran que el personal no se hacía cargo de los bebés, poniendo en riesgo su integridad.
El 10 de cotubre se investigó una denuncia de abuso infantil en una guardería al este del condado de San Diego, informaron las autoridades.
Una empleada de la guardería Alpine presuntamente vertió agua directamente de una botella sobre la cabeza de una niña de 18 meses que dormía, grabó el acto y publicó las imágenes en las redes sociales, con el mensaje “Buenos días, Ava”.
Según los funcionarios del sheriff y Hunan Arshakian, propietario de la guardería en la cuadra 2400 de Alpine Boulevard, la bebé no sufrió ninguna lesión, y agregó que el motivo del presunto abuso no estaba claro.
El supuesto crimen fue reportado el miércoles por la tarde. Al enterarse al respecto una hora después, el director de la instalación inmediatamente despidió a la ayudante de maestro sospechosa de hacerlo y la denunció a las autoridades, dijo Arshakian. Un segundo empleado que se cree que estuvo involucrado en el episodio también fue despedido, dijo. Sus nombres no han sido revelados.
Los detectives de abuso infantil están investigando el asunto, e incluso han realizado diversas visitas sorpresa al lugar para verificar la seguridad de los niños. Según reportes de las autoridades, en algunas visitas se demostró que los niños se encuentran sin supervisión alguna en uno de los salones durante tiempo considerable, por lo que se emitió un citatorio para profundizar la investigación y determinar la posible clausura del lugar.
Información de KUSI News
