Según un nuevo estudio, uno de cada siete bebés cuyas madres estuvieron expuestas al virus del Zika durante el embarazo desarrollaron problemas de salud más adelante.
Investigadores de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. Que realizaron el estudio dijeron que fue el primero en seguir una muestra tan grande de niños expuestos al virus después de su nacimiento.
“Lo que hace que este informe sea único es que estamos mirando la salud de estos bebés más allá de lo que se observó al nacer”, dijo Peggy Honein, directora de trastornos congénitos y del desarrollo de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
“Esto realmente nos proporciona las primeras pistas sobre cuán comunes podrían ser algunas de estas discapacidades del desarrollo neurológico en toda una cohorte de niños que se ven afectados por el Zika durante el embarazo”, dijo Honein.
El zika se asoció ampliamente con la microcefalia del defecto de nacimiento en el invierno de 2016, después de que el defecto congénito se presentó en Brasil con una frecuencia alarmante. El zika es una enfermedad transmitida por mosquitos transmitida por el mosquito Aedes Aegypti, una especie especialmente adecuada para vivir cerca de las personas.
Poco después, los investigadores comenzaron a rastrear a las mujeres embarazadas infectadas en los Estados Unidos, y construyeron una base de datos llamada el Registro de Embarazo y Zika de EE. UU. Se han seguido cerca de 7.300 embarazos hasta la fecha, incluidos 4.800 reportados en los territorios de EE. UU. Y en los estados de libre asociación.
El estudio publicado esta semana analizó específicamente esos 4,800 embarazos, e incluyó mujeres diagnosticadas con Zika en Samoa Americana, Micronesia, Islas Marshall y Puerto Rico y las Islas Vírgenes de los Estados Unidos, especialmente afectadas.
De esos 4,800 embarazos, 1,450 bebés recibieron suficiente atención de seguimiento para ser incluidos en el estudio, y tenían un año de edad en febrero de 2018 (el límite del estudio). Los investigadores encontraron que el 14% de estos bebés tenían un defecto congénito asociado con el Zika, una anormalidad del neurodesarrollo posiblemente asociada con el Zika, o ambos.
Con información de The Guardian
