NUEVA YORK, Nueva York.- Durante el 2017, el beisbol de Grandes Ligas se vio involucrado en varios escándalos que en su momento fueron sancionados por la Oficina del Comisionado Robert Manfred, como el caso del cubano Yuli Gurriel, suspendido 5 juegos que comenzará a pagar cuando inicie la temporada.
Uno de los que se recuerda, fue el uso de los aparatos electrónicos por parte de Boston para robar señas a los Azulejos de Toronto.
Lo mismo sucedió en Arizona con los Diamantes.
Los Bravos de Atlanta fueron severamente castigados y con la expulsión de por vida del que fuera su gerente general John Coppolella por las firmas internacionales, al romper las reglas y trece prospectos de la organización han sido declarados agentes libres.
Las sanciones llegaron a más personal de oficina que se encuentran suspendidos.
Y en plena Serie Mundial, cuando aumentan las cámaras de televisión para la transmisión de un juego, el cubano Yuli Gurriel fue objeto de otro escándalo después de conectar un cuadrangular al japonés Yu Darvish en el tercer juego de la serie entre Astros y Dodgers.
Al llegar a la banca, mientras conversaba con un compañero de equipo, Gurriel hizo un gesto al estirarse los ojos con los dedos, el alusión a los rasgos orientales del serpentinero, a quien llamó “chinito”.
El comisionado lo suspendió cinco partidos, castigo que cumplirá al inicio de la campaña del 2018. Gurriel dejará de cobrar entonces 322 mil 581 dólares durante esa ausencia, cifra más que compensada con el bono de 438 mil 901 dólares que recibió cada integrante de los Astros por ganar la corona.
Con información NFL
