La diabetes gestacional es una enfermedad grave en el embarazo que puede poner en riesgo la vida de madre e hijo o provocar secuelas muy serias en el bebé como enfermedades genéticas y malformaciones congénitas. Es causa común de muerte fetal después de la semana 36 del embarazo debido a descompensación, explicó Gabriel García Noriega, coordinador del área Clínica del Servicio de Ginecología y Obstetricia en el Hospital General de Tijuana.
Por ello la importancia del adecuado control prenatal que ayuda a detectar padecimientos como la diabetes gestacional y la hipertensión durante el embarazo, que deben atenderse adecuada y oportunamente para evitar desgracias.
Además, lo recomendado cuando una pareja desea tener un hijo es planearlo y acudir a módulos preconcepcionales como el que cuenta el Hospital General de Tijuana, donde personal de diferentes áreas diagnostica el estado de salud de la madre y mide el riesgo de cursar con enfermedades durante la gestación.
Si la madre se enferma, el bebé también, por eso es importante cuidar la salud de ambos a través del control prenatal y desde antes con la planeación del embarazo, enfatizó.
Los cambios metabólicos de la madre ocasionados por diabetes gestacional no atendida pueden ocasionar la muerte en el bebé, subrayó.
Otro evento catastrófico con frecuencia es el desprendimiento previo de placenta por enfermedad hipertensiva del embarazo que ocasiona hemorragia interna severa en la madre y puede llevarla a perder la vida.
Ambos padecimientos se detectan después de la semana 20 de gestación, de lo contrario se trata de pacientes crónicas que probablemente no conocían que lo eran.
Si en los Centros de Salud se detectan embarazadas con estos padecimientos, se envían al Hospital General de Tijuana para que sean valoradas sobre cómo corregir el problema y minimizar riesgos, concluyó el especialista.