El exfiscal general de Baja California, Iván Carpio, busca ser nombrado administrador de la aduana de esta frontera.
TIJUANA, Baja California.- El exfiscal general de Baja California, Iván Carpio, busca ser nombrado administrador de la aduana de esta frontera, mientras su segundo abordo, José Galvez, escala posiciones en la Secretaría de Seguridad del estado al ser nombrado encargado de la Guardia Estatal de Seguridad e Investigación (GESI).
Cabe destacar que durante la gestión de Carpio Ramírez como fiscal, agentes del Ministerio Público -entre ellos su propio secretario particular-, fueron detenidos por el cruce y trasiego de droga en territorio estadounidense. Así, con la administración aduanal a su cargo, el exfiscal general representa un riesgo para la seguridad de Estados Unidos, consideraron fuentes consultadas a este respecto.
El 6 de junio del 2022, Octavio Andrée Espino Torres, secretario particular del fiscal Iván Carpio, cruzó 45 paquetes que contenían 34 kilos de metanfetamina, y aunque fingió desconocer el cargamento encontrado en su carro, los mensajes con un contacto de nombre ‘Mario’, revelaron que estaba consciente de la carga que transportaba. Las autoridades estadounidenses tienen registrado y geolocalizado el número de ‘Mario’ y saben dónde se ha movido y que puesto detenta en la estructura de la Fiscalía General de Justicia del estado.
Meses después, el 7 de julio, se registró un histórico decomiso de metanfetamina cuando un camión que ya había sido utilizado para el trasiego de droga, cruzó la frontera desde la garita de Otay hasta National City, donde 2 mil 200 kilogramos de coca fueron descargados por varios sujetos. En el operativo participaron patrullas y al menos un helicóptero que mantuvo seguimiento al pesado vehículo así como a un auto que lo escoltaba.
Destaca el nombre de Rafael Alzúa Honold -sobrino del secretario de Economía de Baja California, Kurt Honold-, los hermanos Mario y Galtrino Contreras quienes junto con Ethgar Velásquez fueron detenidos cuando bajaban el cargamento del camión placas 8WCA718 en una bodega de National City. Aunque el resto de los implicados tienen nexos poco visibles con el gobierno del estado, este cargamento no puede alejarse de la administración bajacaliforniana.
El más reciente caso, pero difícilmente será el último, le corresponde a la agente del Ministerio Público Ana Sofía López Osuna, quien al igual que Andrée Espino, fue negada por Carpio Sánchez y su labor, minimizada. Poco faltó para que el fiscal la redujera a una simple mandadera.
López Osuna, de 35 años de edad participó el 22 de junio en una compleja operación de entrega de droga al transportar casi 40 kilos de cocaína en un vehículo con el que cruzó la garita de San Ysidro sólo para ir a almorzar durante su hora de comida. Hoy en día espera su fecha de audiencia y quizás al igual que su colega Espino Torres, darse a la fuga si se le fija fianza, para gozar de protección en terreno nacional.
Finalmente, en un caso ligado a la Secretaría de Seguridad, José Alonso Moreno Mejía fue detenido con 44 kilogramos de cocaína, al parecer decomisada días antes en un operativo efectuado en la colonia Gran Tenochtitlán.
Con información de Juan Arturo Salinas
